Resumen:
El trabajo aborda las funciones de comunicación en cuidadores principales de adultos mayores con síndrome demencial. El objetivo del presente estuddio es describir las funciones de la comunicación de los cuidadores de adultos mayores con síndrome demencial en el área de salud de Covadonga.
Dentro de su universo sobresalen la comunicación como categoría psicológica, el papel del cuidador principal en los ancianos con demencia,así como las características principales de los cuidadores y el impacto social de la vejez. La principal motivación para la realización de la investigación es la no existencia en Aguada de Pasajeros de programas sistemáticos, dirigidos con especial atención a los cuidadores principales de adultos mayores con síndrome demencial.
Esta realidad, en la práctica, impone a la familia retos que la llevan a la búsqueda de métodos y vías que favorezcan una adecuada comunicación con los adultos mayores que están bajo su cuidado Esta tarea se concreta en el establecimiento de las funciones comunicativas apropiadas para la creación de un ambiente familiar que propicie una adecuada atención a los mismos.
Palabras clave: Cuidador principal, Envejecimiento, Adulto Mayor, Demencia, Comunicación, Relaciones de comunicación
Introducción
En la actualidad escuchamos frecuentemente: "La demencia es una enfermedad que padece el paciente y la sufre la familia".
El cuidador es aquella persona, ya sea familiar o no, que tiene el contacto humano más estrecho con la persona demenciada, satisfaciendo sus necesidades básicas y favoreciendo su vínculo social. En la mayoría de los casos, es un familiar perteneciente al sexo femenino. Destacándose en su cuidado en primera línea las hijas, y en segundo lugar los cónyugues. El que las mujeres sean las que desempeñen el papel principal en el cuidado de los familiares enfermos es prácticamente universal y es un reflejo de la enorme carga que se añade a su tradicional rol de ama de casa. Es conocido además, que al asumir la responsabilidades, del cuidado de sus padres abuelos o seres queridos, el cuidador descuida no solo su salud física y emocional, sino que tiene importantes afectaciones económicas, sociales y laborales con la suficiente intensidad como para generar disfunciones que afectan su vida cotidiana, además de afectar a quien la padece y perturbar la dinámica, del resto de la familia.
La demencia implica una pérdida de funciones intelectuales y de memoria; se acompaña de pérdida progresiva de la atención, el poder de razonamiento y origina a su vez, cambios en el comportamiento. Los síntomas relacionados con la esfera cognoscitiva incluyen el deterioro progresivo de la concentración, la memoria reciente y remota, la orientación, la praxis, la función del lenguaje, la ejecución psicomotora y los cambios específicos en las actividades de la vida diaria.
En el municipio Aguada de Pasajeros, según fuentes del departamento de estadística,
5 901 personas son mayores de 60 años; el número de adultos mayores reportado por médicos y enfermeras de la atención primaria de salud, con síndrome demencial es de 0.84 %, cifra esta que no coincide con los reportes revisados en la literatura nacional e internacional. La Dra. Beatriz Marcheco en su libro "Enfermedad de Alzheimer, Manual para el Médico, el Trabajador Social y la Familia", señala que: diversos estudios han reportado que la enfermedad de Alzheimer y otras demencias, se diagnostican en ocasiones erróneamente por los médicos de la atención primaria, o no es conocida hasta fases muy avanzadas de la enfermedad; también las familias desconocen el carácter hereditario de la misma así como los factores de riesgo socio – psicológicos asociados.
La principal motivación para la realización de la investigación es la no existencia en Aguada de Pasajeros de programas sistemáticos, dirigidos con especial atención a los cuidadores principales de adultos mayores con síndrome demencial .El área de salud de Covadonga reporta 15 adultos mayores con síndrome demencial, evaluados todos ,por los Médicos y Enfermeras de la Atención Primaria de Salud y el Equipo Multidisciplinario de Atención Gerontológica (EMAG), reportando alteraciones frecuentes en las relaciones de comunicación en los núcleos familiares. Esta realidad, en la práctica, impone a la familia retos que la llevan a la búsqueda de métodos y vías que favorezcan una adecuada comunicación con los adultos mayores que están bajo su cuidado Esta tarea se concreta en el establecimiento de las funciones comunicativas apropiadas para la creación de un ambiente familiar que propicie una adecuada atención a los mismos.
¿Cómo se comportan las funciones de la comunicación en los cuidadores principales de adultos mayores con síndrome demencial en el área de salud de Covadonga? El desarrollo de este proyecto llega hasta la descripción de las funciones de comunicación de cuidadores de adultos mayores con síndrome demencial, en correspondencia con la formulación del problema científico.
El valor teórico radica en que a partir de este estudio podrá profundizarse en la elaboración de una estrategia de intervención familiar que contribuya a elevar la preparación de la familia para lograr una adecuada comunicación entre sus miembros y a partir de ahí poder expresar ideas que sustenten o apoyen la teoría relacionada con el sistema de comunicación en la etapa de la vejez.
Tiene implicaciones prácticas pues contribuye a dar solución a un problema que desde el punto de vista práctico se constata en el Municipio Aguada de Pasajeros relacionada con las afectaciones más frecuentes encontradas en el cuidador principal de ancianos con síndrome demencial. Es una investigación de tipo psicosocial que su idea central está encaminada a la solución de un problema que beneficia al grupo primario de referencia al que pertenecen todos los individuos; la familia, por tanto los resultados beneficiarán a todos sus miembros fundamentalmente a los cuidadores y a los adultos mayores que están bajo su cuidado. Además contribuirá a elevar la preparación de la familia para facilitar una adecuada relación de comunicación entre sus miembros, explorar los cambios que se producen en esta etapa, su repercusión en el individuo y la percepción que posee la familia al respecto.
Desarrollo
La comunicación como categoría psicológica.
La comunicación como proceso social se inició desde los albores mismos de la existencia humana, devino elemento esencial del hombre como parte de sus relaciones sociales y ha sido y es factor fundamental en su desarrollo, tanto en lo psíquico como en lo sociológico, al igual que el hombre ha pasado por un largo camino de desarrollo, se perfeccionó junto con la producción social y la conciencia social. En su desarrollo se ha hecho más compleja en cuanto a sus formas concretas, se ha enriquecido su contenido y ha experimentado la influencia de las formas dominantes de la conciencia social.
En la medida en que la sociedad se ha desarrollado y ha pasado de una formación económico-social a otra los medios de comunicación se han perfeccionado y adecuado a las necesidades históricas.
A mediados de los años sesenta, se comenzó a conformar la ciencia de la comunicación con la ayuda de los aportes de un grupo de disciplinas científicas, de los llamados campos de las ciencias naturales, sociales y humanísticas, por lo que constituye aún una ciencia en desarrollo. De tal manera, al estudiar desde el punto de vista teórico los fenómenos comunicativos, nos encontramos con diferentes teorías, corrientes y puntos de vistas, tanto en el orden epistemológico, como metodológico.
Entre estas se destacan:
- Las teorías que parten de las disciplinas científicas que estudiaban los fenómenos comunicativos. Entre los que se encuentran las teorías matemáticas, las socio-psicológicas y las antropológica-lingüísticas.
- Las teorías que parten de dividir los estudios antes relacionados a partir de los niveles de la semiótica y que los clasifica en: sintácticas y pragmáticas.
- Las que parten del número de personas que participan en los procesos comunicativos y que las designa como: Comunicación Interpersonal, Comunicación Grupal, Comunicación Organizacional y Comunicación Masiva o Social.
Las que toman como punto de partida elementos del proceso de comunicación que se quiere estudiar y la técnica que se emplea para su análisis.
Es por ello que entre los diferentes conceptos de comunicación que han surgido con el de cursar de los años, este trabajo define la comunicación como fenómeno psicológico que caracteriza al ser humano y lo diferencia del resto de las especies animales. Es el proceso de interacción sujeto – sujeto, a través del cual se intercambia información, sentimientos, ideas, etc., que produce una influencia mutua que trae como resultado una modificación de ambos.
A partir de esta definición, se pueden hacer una serie de puntualizaciones:
- Es un proceso eminentemente activo, ya que cada uno ejerce una influencia sobre el otro, y no se limita a recibir pasivamente.
- A diferencia de la actividad, la comunicación no puede ser planificada en todos sus pasos, ya que no se puede predecir con absoluta certeza cómo va a reaccionar el otro.
- Durante el intercambio no sólo se trasmiten conocimientos, sino también sentimientos, emociones, etc.
- Durante la interacción se produce una acción reguladora y autorreguladora que, de una u otra forma, provoca cambios en los interlocutores.
La demencia en los ancianos, papel del cuidador principal
La demencia es un síndrome, generalmente de naturaleza crónica o progresiva. Se caracteriza por un déficit de múltiples funciones corticales superiores y deterioro en el control emocional y en el comportamiento social o de la motivación. Es una de las afecciones que más limita las actividades de la vida diaria del adulto mayor .Esta enfermedad del sistema nervioso central provoca pérdida de memoria y de otras funciones mentales superiores así como alteraciones de la conducta y la personalidad de los que la padecen.
Las demencias constituyen un serio problema de salud pública por ser una enfermedad de alto costo económico y social, por lo difícil y tardío de su diagnóstico y por su curso progresivo e invalidante.3
La demencia es considerada como el deterioro progresivo de las capacidades intelectuales del individuo con el paso de los años. Ella poco a poco va limitando a la persona para la realización de las actividades instrumentadas y de la vida diaria, contribuyendo a su dependencia cada vez mayor de otra persona, a la que se le denomina cuidador. Marcheco Beatriz, 2005:54.
Esta enfermedad provoca alteraciones no sólo en el enfermo sino también en la familia ya que su aparición demanda de una redistribución de los roles familiares y genera un elevado estrés por las múltiples manifestaciones conductuales y el desconocimiento del proceso que las ocasiona, entre otros factores.
La demencia es una trágica realidad que afecta, obviamente, a la persona que la sufre pero, en una medida igualmente importante, a todo el que día tras día cuida de alguna persona afectada. Las personas que por diversas circunstancias, cuidan de un enfermo ven como su modo de vida va cambiando y cada pérdida de una capacidad determinada es una nueva responsabilidad y una faena a realizar en adelante. El anciano con Alzheimer tiene poca capacidad de adaptarse a su situación y, por lo tanto, son los que lo rodean los que constantemente han de adaptarse a las necesidades creadas. A medida que la demencia va progresando, el enfermo se vuelve más inseguro de lo que le rodea y que los demás quieren de él, muchos pacientes se refugian en las personas que transmiten mejor el sentimiento de seguridad.
Esta enfermedad es particularmente devastadora no solo por el deterioro progresivo de la persona que la padece, sino también por el impacto en la familia. Dentro de la familia, la prestación de cuidados no acostumbra a repartirse por igual entre sus miembros, sino que existe una "cuidador(a) principal", sobre el que recae la mayor responsabilidad del cuidado. Por consiguiente, el cuidador es aquella persona que de forma cotidiana se hace cargo de las necesidades básicas y psicosociales del enfermo o lo supervisa en su domicilio en su vida diaria. Además, estas personas en muchas ocasiones tienen que interrumpir su ritmo habitual y limitar su vida social, lo que trae con el tiempo una repercusión negativa en su salud desde todos los órdenes.
Durante el curso evolutivo se pueden presentar las siguientes circunstancias.
- Alteración del pensamiento abstracto.
- Pérdida de la capacidad de juicio.
- Cambios en la personalidad.
Hay que tener presente que hablar de demencia significa referirse a un síndrome y no a una enfermedad concreta.
Demencias de causa psiquiátrica. Se conocen como pseudodemencias. La más frecuente es la asociada a la depresión. Esta enfermedad, en el anciano, cursa frecuentemente con sintomatología de deterioro cognitivo. Por esta razón, es frecuente que en las fases iniciales se cometan errores diagnósticos. Otra patología de tipo psiquiátrico que puede evolucionar con deterioro cognitivo es la esquizofrenia.
Demencias de causa tóxica. Clásicamente, hay que citar los procesos asociados al alcoholismo. De todas formas, las causas más frecuentes son las asociadas al consumo de fármacos. Los ancianos son especialmente sensibles a sus efectos y muchos de ellos son capaces de producir cuadros confusionales que, en la mayoría de las ocasiones, son reversibles.
Demencias de causa metabólica. Muchos trastornos de este tipo pueden originar una sintomatología de pérdida de funciones superiores, diabetes, hipotiroidismo, deshidratación, etc.
Demencias de causa mecánica. Cualquier agresión física al cerebro puede lesionarlo y producir un cuadro demencial. A tener en cuenta están las lesiones continuadas que pueden sufrir los practicantes de boxeo, los traumatismos craneoencefálicos accidentales, los tumores cerebrales y la hidrocefalia.
Demencias carenciales. Básicamente, las asociadas a déficit de vitamina B 12 y ácido fólico, sustancias que el cerebro precisa para conseguir un funcionamiento adecuado.
Demencias de etiología infecciosa. Dentro de este apartado el tipo más frecuente es el complejo sida- demencia, que puede afectar a personas infectadas por el virus de la inmunodeficiencia humana VIH. La presencia de antibióticos eficaces ha disminuido espectacularmente la demencia asociada a la sífilis.
Demencias vasculares. Su origen está en las alteraciones de las arterias que irrigan el cerebro. Habitualmente se asocia a la enfermedad aterosclerótica. En la mayor parte de los casos se observan zonas cerebrales infartadas que condicionarán una evolución fluctuante hacia una progresiva demenciación. Son demencias por multiinfartos.
Demencias degenerativas. Están asociadas a la atrofia y a la involución patológica del sistema nervioso central. La más frecuente es la enfermedad de Alzheimer, que supone la mitad de todos los casos de demencia. Si bien no se conocen claramente las causas precipitantes de este proceso, sí que están documentadas las alteraciones anatómicas y de los neurotransmisores responsables de la enfermedad. Otros procesos serían la enfermedad de Pick y la demencia asociada a algunos casos de enfermedad de Parkinson.
Una de las fuentes importantes de apoyo y cuidado en la vejez es la familia en la medida que es la sede de transferencias intergeneracionales de recursos materiales y de cuidados afectivos de suma importancia en la vida cotidiana de las personas mayores. La encuesta Salud, Bienestar y Envejecimiento (SABE) muestra una alta proporción de personas mayores que reciben apoyo familiar alcanzando la cifra de 93 % en la Ciudad de La Habana, dentro de la familia no todos asumen de igual manera el cuidado de sus enfermos.El cuidador es aquella persona que de forma cotidiana se hace cargo de las necesidades básicas y psicosociales del enfermo o lo supervisa en su domicilio en su vida diaria. Estas personas en muchas ocasiones tienen que interrumpir su ritmo habitual y limitar su vida social, lo que trae con el tiempo una repercusión negativa en su salud desde todos los órdenes.
Características generales de los cuidadores
- Es más frecuente el rol de cuidador en mujeres de mediana edad y casadas.
- La mitad de los cuidadores trabajan y el 35 % tienen más de 65 años y sufren enfermedades crónicas.
- Los cuidadores se sienten aislados, participan en pocas actividades sociales y tienen preocupaciones financieras.
- Los esposos que se convierten en cuidadores son más propensos al estrés, al tener que adaptarse a las nuevas necesidades, cambiar su vida laboral, sexual y social, por lo que corren un alto riesgo de deterioro de su salud física.
- Los cuidadores de pacientes con demencia le dedican las 24 horas a sus familiares, lo que reduce el tiempo libre, en muchos casos abandonan los trabajos y disminuyen los ingresos económicos.
- Existen en el mundo asociaciones de familiares de personas con demencia en las que reciben comprensión y ayuda.
- La mayor parte de las personas con demencia viven en sus casas y su familia es responsable directa de ellos en el 80 % de los casos.
El cuidador en su quehacer diario está expuesto a presentar problemas psicológicos, se pueden identificar por las dificultades que presentan para relacionarse con los demás, incluyendo también, ansiedad, tensión, insatisfacción con la propia conducta e incapacidad para funcionar eficientemente.
Características socio-demográficas del envejecimiento, Impacto en la vejez
El mundo actual se enfrenta a un proceso de envejecimiento como resultado del cual cada día son más las personas que sobrepasan los 60 años. Aparejado a este proceso existe un aumento progresivo de ancianos con síndrome demencial, ante lo cual resulta preocupante la situación de los cuidadores, a los que se les presta una escasa atención, a pesar de ser considerados enfermos silentes. Todo individuo, sea cual fuera su situación, tiene la necesidad de comunicarse. Una escucha activa puede ayudarle a responder de forma positiva. Durante Molina, 2006: 121.Detrás de estos logros se encuentra la labor de un buen cuidador.
El número de personas con demencia, a nivel mundial, crece rápidamente y las cifras lo demuestran porque en sólo 25 años, 34 millones de personas la padecerán. La cifra cobra significado cuando se coloca en el contexto del incremento de la expectativa de vida y el envejecimiento de la población en países en desarrollo. En el presente 66 % (11 millones) de las personas con demencia vive en países en desarrollo y para el 2025 esta cifra se elevará hasta 75 % (24 millones).
Es conocido el impacto que sobre la sociedad tiene el envejecimiento progresivo de la población, aún más si sumamos la morbilidad que este fenómeno conlleva. Argentina, Uruguay y Chile ocupan los primeros lugares en porcentaje de envejecimiento en el continente americano, encontrándose en la categoría de "vejez demográfica".
El envejecimiento de la población es sin duda la principal característica demográfica de Cuba en la actualidad y también respectivamente, dada sus implicaciones económicas y sociales. Poco más de 1,7 millones de personas tenían 60 años y más en el 2004 (15,4 %) de la población, representando en la actualidad el 16 %. Este comportamiento debe intensificarse y para el 2025, se pronostica que casi uno de cada cuatro cubanos será un adulto mayor (21,6%), para ese entonces la edad promedio será de alrededor de 44 años y Cuba tendrá todas las características de un país envejecido. Ese es el efecto principal de la transición de la fecundidad y obviamente la sociedad tendrá que adecuar sus acciones, desde el punto de vista de su funcionamiento económico, social, cultural y otros.
Esta realidad impone grandes retos a toda la sociedad y en particular al sector de la salud ya que si bien se planifican acciones de promoción y prevención de enfermedades para la edad avanzada que tienen el objetivo de garantizar un envejecimiento satisfactorio, existe una porción de este grupo poblacional que presenta afecciones discapacitantes que dificultan el mantenimiento de una vida independiente y funcional.
Los avances científicos y tecnológicos han permitido el alargamiento de la vida y en muchos casos el disfrute de las personas ancianas de la última etapa de sus vidas. Pero así como la vejez no es un fenómeno homogéneo, la calidad de vida de los ancianos y su bienestar varían como resultado de esa diversidad. La edad es uno de los factores que condiciona la dependencia, influyendo de manera decisiva el aislamiento, la pobreza, la invalidez y el medio adverso.
Conclusiones
- En la mayoría de los cuidadores principales la calidad de la información que le trasmiten al demenciado es regular, no favoreciendo la orientación del anciano; limitándose solo a señalar sus errores y fallos de sus hábitos .
- En la función afectiva prevalece la amabilidad, el respeto, el apoyo y la seguridad en las relaciones de comunicación del cuidador con el demenciado..
- En la función reguladora predominan las orientaciones empleando demasiadas palabras y explicaciones, el tono autoritario y exigente para ajustar, dirigir y guiar la conducta de los ancianos.
Bibliografía
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Autores: MSc Célida Mujica Caicoya: [email protected]; Filial Universitaria Municipal Aguada de Pasajeros. MSc Ricardo León Hidalgo: [email protected]; Filial Universitaria Municipal Aguada de Pasajeros.
Datos para citar este artículo:
Ricardo León Hidalgo. (2013). Las funciones de comunicación en cuidadores de adultos mayores con síndrome demencial. Revista Vinculando, 11(1). https://vinculando.org/sociedadcivil/funciones-de-comunicacion-cuidadores-principales-adultos-mayores-sindrome-demencial.html
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