Estamos viendo la represión y los resultado del proyecto neoliberal en todos los ámbitos. Pero son los obreros y los indios quienes más vienen sufriendo los dolores de ese proyecto de muerte. Militarización, masacres, destrucción del ejido, reforma del 27 constitucional, de una parte; por otra desempleo, bajos salarios, destrucción de la planta productiva y ahora reforma de la LTF y del 123 constitucional, en medio de la gran recesión económica son las políticas y los resultados del proyecto neoliberal que actualmente aplica en México el gobierno del presidente Zedillo. Siempre, pero ahora con todos sus poderes copota o reduce al silencio a las voces disidentes.
A ti TATIC, padre de los indios como Bartolomé de las Casas, te quieren callar y junto con la CONAI, o someterlos a la dominación, para que justifiquen la guerra, la muerte y las reformas, como lo hicieron ya con algunos organismos, Iglesias y personalidades. Se subieron al tren neoliberal y ahora dicen que “no hay de otra”, “que es una oportunidad histórica”, o reducirlos al silencio, como lo testifican siglos de ignominia y actualmente las masacres de Acteal, Aguas Blancas, El Charco y centenas de asesinatos individuales. O se someten o son callados. No soportan la diversidad. Son los dioses que no admiten la alteridad.
Esto es semejante a la historia de la bruja y el príncipe, que bien se puede aplicar a Tatic, o a la CONAI, y a todos los mártires de la Palabra Verdadera y a todo el pueblo que va construyendo su historia más allá del horizonte establecido, más allá del silencio, del dolor y de la muerte.
“Erase una vez un príncipe que tenía una voz maravillosa que encantaba a todas las criaturas que lo escuchaban. Su canto era tan bello que hasta sedujo a la bruja que vivía en el bosque negro y que se enamoró de él. Pero como era diferente a todos los demás que con el mero hecho de oír se sentían felices, ella decidió cantar también. ¡Qué lindo dueto haremos! Pensó. Y se puso a cantar de inmediato. Pero sucede que las brujas no cantan muy afinado, que digamos. Bastaba con abrir la boca para que salieran sonidos extraños que sonaban como el croar de sapos y ranas. Las burlas fueron generalizadas. La bruja se llenó de envidia rabiosa y lanzó contra el príncipe el más terrible de los hechizos: si no puedo cantar como tu cantas, haré que tu cantes como yo canto. Y el príncipe se transformó en sapo. Avergonzado de su nueva condición, huyó y se escondió en el fondo de la laguna, donde vivían los sapos y las ranas. Se volvió igualito a los batracios, menos en una cosa. Siguió cantando tan bonito como siempre había cantado. Pero esta vez a quien no le pareció el canto del nuevo sapo fue a los sapos y a las ranas que sólo sabían croar. El canto nuevo sonaba a sus oídos como una cosa del otro mundo que perturbaba la concordancia de su monotonía sapal. Severos advirtieron: Quien vive con ranas y sapos tiene que croar como ranas y sapos. El príncipe-sapo tuvo que callar su canto y no tuvo alternativas: tuvo que aprender a croar como todos los otros lo hacían. Y tantas veces lo repitió que terminó por olvidar los cantos de otro tiempo. No, no se olvidó del todo… porque cuando dormía se acordaba y oía la música antigua prohibida que seguía sonando dentro de él. Pero al despertar, se le olvidaba. Aunque no del todo, quedaba una nostalgia indefinible. Nostalgia que no sabía muy bien qué era. Nostalgia que le decía que estaba lejos, muy lejos del hogar…”
Esta historia es como un resumen de la palabra verdadera, de indios y trabajadores, de gente como Tatic. Es la misma historia, en donde se mezclan el amor, la belleza y el hechizo del olvido. No es un cuento de hadas donde todo es felicidad. La Palabra Verdadera lucha por romper el hechizo de la palabra mala que nos hace adormecer y olvidar las melodías. Es oír con atención la canción que sólo se oye en el intervalo del silencio del croar de los sapos, que apenas nos llega como pequeños y fugaces fragmentos desconexos. Es una batalla que nos hace regresar a nuestro destino, inscrito en las profundidades del mar del alma, del mar de la historia, del mar de la vida. Más allá del palabrerío, del activismo, de las justificaciones, del canto de las sirenas, del proyecto de muerte.
Ha sido por la Palabra Verdadera, de los más pequeños, de los contadores de historias, la palabra de los poetas donde la letra muerta se hizo viva, donde la conciencia despertó nuestro misterio. Es nuestro misterio al que habla, quien habla y quien invoca. Por mi voz hablan los pequeños, la historia, la verdad:
Algunos piensan que Tatic, la CONAI, los más pequeños son unos locos con sus historias y sus sueños de autonomía. Hasta existe el dicho que de poetas y locos todos tenemos un poco. Los sapos y las ranas al oír las canciones de ustedes dicen: ¡es un poeta! ¡están locos! Y han tratado de curarlos para que se eduquen a la realidad, pues para ellos ser normal es croar como sólo ellos croan. Pero jamás van silenciar las canciones que han sido expresadas y que empiezan a crecer por todos lados, en muchos pueblos. En medio de la ruidosa monotonía de la vida escucharemos estos cantos, la Palabra Verdadera, la melodía que no existía, el habla de un extraño que vive en nosotros y que nos visita en los sueños. Es posible que los sapos y las ranas vivan más tranquilos. Para ellos todos los problemas están resueltos. Pero con la Palabra Verdadera hemos experimentado una felicidad que sólo vive en la belleza. Esa belleza que encontramos solamente en la melodía de los pequeños, en los sueños, olvidados y reprimidos, de los obreros, en el profetismo de TATIC, en el fondo del alma de nuestros pueblos.
México, D. F., 22 junio de 1998
Intersindical Primero de Mayo
Datos para citar este artículo:
Rubem Alves. (2004). Cuentos: Sobre tatic y la bruja. Revista Vinculando, 2(1). https://vinculando.org/documentos/cuentos/tatic_bruja.html
maria gonzalez dice
hola yo estoy en pareja; yo a el lo amo pero sufro mucho por que el dice k me ama pero no lo entiendo por las cosas k hace y kiero olvidarme de el sin sufrir necesito ayuda gracias.