Consideraciones previas para las prácticas de facilitación de capacitación.
Desarrollo
El presente documento pretende entregar – de forma muy escueta – la forma en que aprenden los adultos con la finalidad de contribuir a las prácticas de capacitación de quienes se desempeñan como Facilitadores.
Iniciaremos conociendo que la palabra “adulto” proviene del latín “adultus” que etimológicamente significa crecer. Lo anterior, nos permitirá establecer que éstos no dejarán de aprender a lo largo de su vida, contradiciendo los planteamientos de épocas pasadas, las cuales postulaban que la inteligencia era fija y que ésta era adquirida en una etapa particular de la persona.
Como facilitadores de capacitación, debemos comprender que nuestro rol se desarrolla en la Andragogía. Comprenderemos como Andragogía a la educación que se proporciona al adulto – que decide aprender un contenido, proceso y/o actitud en un plan formativo formal – y que éste participará activamente en su propio aprendizaje, es decir, este sujeto intervendrá en la planificación, programación, realización y evaluación de las actividades educativas en condiciones de igualdad con sus pares participantes y con el facilitador de capacitación.
Obtenemos de Undurraga Infante (2004) que existen autores que sostienen que no existe diferencia entre el aprendizaje que realiza un niño y un adulto, para lo cual nos entrega a Houle, 1972; Feringer, 1978; Hart, 1975 en Brundage y Mackeracher, 1980; como ejemplo de quienes sostienen que entre Pedagogía y Andragogía no existe diferencia y que sólo se trata de un proceso que es realizado por un ser en distintas etapas de desarrollo. Siguiendo a la misma autora referida (Undurraga) serán: Knowles et al., 2001; McClusky, 1970 en Brundage y Mackeracher, 1980; Knox, 1981; Knox, 1986; los autores quienes sostendrán que existen diferencias significativas en relación a la forma en que aprenden niños y adultos.
Undurraga (2004) nos entrega un cuadro comparativo de las diferencias que existirán, según Knowles, M. et al. (1998), entre pedagogía y Andragogía.
Supuesto sobre el aprendizaje | Pedagogía | Andragogía |
---|---|---|
Necesidad de conocer | Para aprobar y ser promovidos se requiere que los aprendices sepan y aprendan lo que el maestro enseña. No necesitan saber cómo van a aprender no cómo aplicar el conocimiento adquirido en sus propias vidas. | Necesitan saber para qué aprender antes de involucrarse en la tarea, entender en el fondo el sentido del aprendizaje. |
Autoconcepto del Aprendiz | Personalidades dependientes. | Responsabilidades por sus propias decisiones (aprendizaje autodirigido). |
Rol de la experiencia | La experiencia del aprendiz es de poco valor como recurso de aprendizaje. | Los adultos se integran a situaciones educativas con un mayor y diferente tipo de experiencias que un niño. Sin embargo, esto mismo puede tener algunos efectos negativos: hábitos mentales, sesgos y prejuicios, resistencia a incorporar nuevas ideas y dogmatismo. |
Disponibilidad para aprender | Lo determina el profesor | Disponibles para aprender aquellas cosas que les servirán para enfrentar mejor las situaciones de la vida real (tareas evolutivas). |
Orientación para el aprendizaje | Centrada en la asignatura, el aprendizaje se reduce a la adquisición de aprendizajes sobre un tema. | Centrados en la vida (aprenden mejor cuando los nuevos conocimientos, habilidades y valores son aplicables a la vida real). |
Motivación | Externa (certificación). | Interna (satisfacción laboral, autoestima, calidad de vida). |
Sin embargo, el recuadro anterior se le puede entregar diversos cuestionamientos. Es por ello, que a continuación, revisaremos tres teorías del aprendizaje que nos ayuden a comprender algunas observaciones a señalar y, con ello, concluir las características finales que poseerá – para el autor – la Andragogía.
Teorías del Aprendizaje
Las teorías del aprendizaje son aquellas que nos entregan la forma en las cuales éstas (las teorías) consideran que se realiza el aprendizaje y, por tanto, nos brindan la posibilidad de observar, predecir, controlar y encaminar procesos que nos permitan dar cuenta que el aprendizaje ha sido obtenido. Brenda Mergel en “Diseño Instruccional y teorías del aprendizaje” nos entrega los fundamentos esenciales de las tres teorías del aprendizaje a considerar, considerando al:
- Conductismo: como aquella teoría que se centra en los cambios observables de la conducta del sujeto, es por ello, que serán los patrones de conducta los que sustentarán su planteamiento, incluyendo a los patrones de conducta automáticos.
- Cognoscitivismo: Los procesos que originan cambio en la conducta, será la preocupación para esta teoría. Según Mergel: “estos cambios son observados para usarse como indicadores para entender lo que está pasando en la mente del que aprende”.
- Constructivismo: Cada persona construye su propia perspectiva del mundo que le rodea a través de sus esquemas mentales desarrollados y, principalmente, de sus experiencias previas. Es por ello, que “el constructivismo se enfoca en la preparación del que aprende para resolver problemas en condiciones ambiguas”.
Lejos de profundizar en dichos planteamientos, lo que debemos poseer claridad es que éstos acogen al sujeto -que aprende – de distinta manera, siendo la más humana de éstas, el Constructivismo. Lo anterior, no quiere referir que el Conductismo y el Cognoscitivismo no sean necesarios y/o desarrollados, pero para nuestra práctica como Facilitadores de capacitación debemos considerar – y no perder nunca de vista – que el Constructivismo nos ofrece mayor manejo de los grupos a capacitar, pues rescata y considera muchos elementos brindados por dicha teoría.
En resumen, actualmente se comprende que las experiencias educativas y de capacitación deben ser nutridas bajo el arelo de la teoría del constructivismo, por lo que necesitará que lo entregado posea tanto aplicabilidad a su desempeño diario (personal y laboral) como rescate los conocimientos previos.
Nuestro rol de Facilitador de capacitación debe contemplar los siguientes puntos esenciales:
- “Los adultos tienen numerosas experiencias de vida que se estructuran y limitan los nuevos aprendizajes, los cuales se focalizan básicamente en extender los significados, valores, habilidades y estrategias adquiridos en el aprendizajes previos.
- Las presiones hacia el cambio provienen mayormente de factores relacionados con los roles sociales y laborales, y de la necesidad personal de continuar la producción y la autodefinición.
- Las necesidades de aprendizaje están relacionadas con las situaciones de vida presentes.
- Los adultos son más proclives a usar sus propias necesidades y a describir sus procesos de aprendizaje a través de formas verbales, lo cual les permite negociar la planificación de sus programas de aprendizaje.
- Los adultos tienen un autoconcepto definido y una autoestima que les permite actuar como seres independientes.
- Los adultos tienen asignado un rol productivo en la sociedad, y se espera de ellos que sean productivos”.
De todo lo referido, debemos comprender que nuestro rol – como facilitadores de capacitación – es fundamental para las personas, pues se les brinda la posibilidad de autorrealización y de reafirmar, a través de nuestra entrega profesional, que el ser humano sin importar la edad o etapa de desarrollo en la cual se encuentre, puede y debe capacitarse, para que de dicha forma, se aporte – cada día – a la sociedad que conformamos.
Notas:
- Undurraga Infante, Consuelo. “¿Cómo aprenden los adultos?. Una mirada Psicoeducativa”. ISBN Nº 956-14-0767-1. Primera edición.
- Mergel, Brenda. “Diseño Instruccional y teoría del aprendizaje”. Estudiante de Postgrado del Programa Comunicaciones y Tecnología Educacional de la Universidad de Saskatchewan, Canadá. Mayo, 1998.
- Ibíd.
- Undurraga nos entrega dichos puntos, los cuales fueron brindados por Brundage y Mackerarcher.
Datos para citar este artículo:
Nidy Liz Marchant Díaz. (2015). ¿Cómo aprenden los adultos?. Revista Vinculando, 13(1). https://vinculando.org/educacion/como-aprenden-los-adultos.html
María Soledad Domínguez dice
Siempre es muy relevante el vínculo que establece un docente con sus estudiantes, ya que el docente es un facilitador de la formación de personas, los vínculos de confianza se deben crear entre los alumnos para lograr ingresar a sus espacios y hacer mágicos los aprendizajes que deben adquirir cada uno, dándole el protagonismo para que sean ellos sus propios constructores de sus aprendiazaje, lo que hace que sean capaces de pensar y responder, seguriad y confianza que sus bases son pilares de una construcción solidad de aprendizajes perdurables y de calidad que les permitirá enfrentar con mayor propiedad su cumplomiento de metas para lograr sus propósitos y ser integrales en el entorno que les rodea dentro de los márgenes de su pertinencia, sociocultural, económico, y alcanzar experiencias de aprendizajes que les faciltarán incertarse a la sociedad si nos educamos entre todos y formamos una sociedad con sabiduría con un enfoque valorico, cognitivo, personal y grupal, formar una sociedad de personas con estabilidad mental y protagonistas de sus aprendizajes, una sociedad educada hace que se logre que un país llegue a ser un pais desarrollado y enriquecido de profesionales, técnicos que hacer que sea futurista la mirada que cada vez será una sociedad mejor en todo ámbito, en la igualdad de oportunidades para todos y todas.
Nidy Marchant dice
Muchas gracias por su comentario y el tiempo invertido.