Introducción:
El contexto actual en nuestro país da muestra de que han surgido distintos fenómenos sociales a partir de las políticas económicas de los países desarrollados. La migración internacional es uno de los grandes fenómenos globales de nuestros días. De esta forma se observa un ir y venir de la población mexicana hacia el vecino país. "La mayoría de los movimientos poblacionales en todas las regiones geográficas del mundo obedece a la búsqueda de mejores condiciones de vida, en lo cual subyace la operación de diversos y complejos factores estructurales, como son las asimetrías económicas y sociales entre las naciones, la creciente interdependencia económica y las intensas relaciones e intercambios entre los países"[1]
La migración hacia los Estados Unidos es una práctica que se ha venido practicando en tiempos de antaño, se puede decir de forma general que actualmente se ha incrementado la migración a causa de la falta de oportunidades de empleo en México. Por ello la sociedad migrante se ha visto en la necesidad de emigrar hacia el vecino país abandonando su lugar de origen.
Dando una definición breve y general entendemos la migración como el desplazamiento de una población de un lugar de origen a otro destino, ya sea para establecerse de forma temporal o permanente. Aunque a partir de la literatura tradicional sobre la movilidad de la población se analizan dos categorías como lo señala Alejandro Canales; "Por un lado, se usa el termino de "migración permanente" para referirse a quienes cambian de manera definitiva de lugar, región o país de residencia habitual. Por otro lado, se usa el término "migración temporal" o "circular", para referirse a aquellos desplazamientos continuos y recurrentes, que definen un constante ir y venir, pero en donde la residencia habitual se mantiene a la comunidad de origen"[2]
Consecuente es oportuno saber qué es un migrante. Así pues la palabra migrante proviene del latín migräre (movimiento), éste hace referencia a cambiar de sitio, moverse de un lugar a otro abarcando emigración e inmigración. Por otro lado y desde la perspectiva gramatical de Dean J.;
"Migrante es el participio presente del verbo migrar y, en cuanto tal, considera la acción misma de migrar, la acción presente y no acaba de moverse de un territorio a otro. El mismo verbo migrar, no se concibe como tal, sino solamente en sus acepciones de inmigrar y emigrar. ¿Limites de un idioma? Quizá, o tan solo limites de un lenguaje que aún no es capaz o no quiere ser capaz de explicar – y reconocer – un fenómeno real: el del migrante"[3]
Definir el momento de emigrar hacia los Estados Unidos y retornar a su país de origen es bastante complejo por el hecho de las razones que les obligan a hacerlo, pues existen diversos factores, uno que anteriormente se mencionó y de forma general es por la falta de empleo.
Parece ser que el fenómeno migratorio responde a necesidades de vida económica y social mejorada por lo que anteriormente se dijo a grandes rasgos. Aunque el impacto de la migración mexicana puede presentarse en variadas maneras en el país, comunidades y familias, así como lo señala la Encuesta de la Dinámica Demográfica (ENADID) realizada en 1992, "El fenómeno de la migración a Estados Unidos no es privativo de las áreas rurales ni de localidades urbanas pequeñas de las diversas regiones del país, sino que se advierte con cierta intensidad en las ciudades intermedias y grandes. De hecho poco menos de uno de cada nueve hogares localizado en las localidades intermedias y grandes del país se encuentra en la misma situación"[4]
La migración se ubica en áreas rurales y urbanas, porque de igual manera existen razones para emigrar. Ahora conviene destacar algunos que el Consejo Nacional de Población determinó en su estudio:
"La insuficiencia dinámica de la economía para absorber el excedente de fuerza de trabajo; la demanda de mano de obra mexicana en los sectores agrícola, industrial y de servicios de la Unión Americana; el considerable diferencial salarial entre ambas economías; la tradición migratoria hacia el vecino país del norte y la operación de complejas redes sociales y familiares que vinculan los lugares de origen y destino, los cuales facilitan la experiencia migratoria de los mexicanos en los Estados Unidos"[5]
Otras de las razones que orillan a la sociedad mexicana a emigrar a otro país pueden ser según Méndez, "…factores que actúan como precipitadores de los movimientos migratorios al interior del país, uno corresponde a la explosión demográfica y el otro a la crisis en la economía nacional"[6]
Ambos factores han sido sin duda determinantes en la consolidación de la migración, así como el aumento de la población migrante hacia los Estados Unidos.
Estudiante migrante michoacana
en escuela del estado de Carolina del Norte.
Foto por Francisco Sixtos Niniz
Por otro lado, se han realizado estudios sobre la población que emigra a los Estados Unidos, aunque no hay datos exactos, mas aun cuando es necesario cuantificara niños y jóvenes que emigran. En este sentido, el investigador Gustavo López Castro muestra los datos siguientes según edades que emigran a los Estados Unidos solo para el caso del estado de Michoacán asociado al censo del 2000, INEGI.
"Es evidente que el primer lugar lo ocupa el subgrupo de edades que oscilan entre los 18 a los 54 años, el segundo el de los 13 a los 17 años, mientras que el tercero lo ocupa el subgrupo de 0 a 12 años. En síntesis hay un número bastante considerable de niños y jóvenes que interactúan con el fenómeno migratorio"[7]
Por lo tanto el fenómeno migratorio es un proceso de adaptación e integración, ya que implica movilizarse continuamente, los jóvenes que emigran deben adaptarse y negociar en los lugares donde residirán un tiempo, esto implica, un proceso de inserción en la cultura, como es el caso del modo de vida, costumbres y tipo de religión. De igual manera las condiciones geográficas como el clima, la temperatura y el espacio.
Como puntualmente menciona Lain Chambers la migración "exige vivir en lenguas, historias e identidades que están sometidas a una constante mutación"[8]
Todo lo anterior hace complicados los procesos de adaptación de los migrantes, porque continuamente tienen que negociar entre su cultura y la cultura del lugar donde se insertan, por lo que en la teoría transnacional se habla de procesos de adaptación e incluso de pérdida de identidad de un sujeto que se integra a ese nuevo lugar, sin embargo, no se debe perder de vista los factores que obligan a los individuos a experimentar estos procesos.
Es necesario puntualizar que el número de personas que emigran a los Estados Unidos esta creciendo considerablemente en la actualidad. Para tener un panorama actual, "se estima que en 2008 el numero de mexicanos que viven en Estados Unidos era de alrededor de doce millones de personas. Si se considera también a los descendientes de mexicanos nacidos en territorio estadounidense, la cifra asciende a 31 millones de personas"[9]
Referente a esto López Castro refiere "Ir al Norte", resulta hoy prácticamente un lema de vida para miles de niños, niñas y adolescentes"[10], situación semejante que tal vez se vive en muchos estados de la república mexicana.
Es muy notable que la población mexicana se esta expandiendo cada vez más por el territorio norteamericano, por tal razón los niños y jóvenes están padeciendo del proceso migratorio. Pero bien, se puede decir que emigrar a los Estados Unidos se ha convertido en una fuerza social imparable que trae consigo repercusiones o a otros rubros como es el caso de la educación.
La adaptación de la población migrante es un momento fundamental, dado que el sujeto transita por momentos de aprendizaje conformados, según Piaget por tres fases que son la asimilación, la acomodación y equilibrio de un entorno, una cultura y una lengua que no son las propias.
En México, la migración ha estado creciendo rápidamente, caracterizado por el traslado de una persona o grupo de personas a otros países, en este caso, México y Estados Unidos. También aunado a esto, el cambio y salida repentina de niños y jóvenes a las escuelas, es decir viajan de México a los Estados Unidos para establecerse e incorporarse a alguna escuela por cierto periodo de tiempo. Este suceso referente a que los alumnos "se esfuman" literalmente de la escuela y regresan en meses o años a su país de origen o de los padres, se esta volviendo cotidiano. Con el siguiente poema lo revela un niño inmigrante como parte de un proyecto individual de la escuela de Estados Unidos donde estudiaba:
Mario’s Poem
An August hot summer morning
I sat on the edge of my bed
wondering,
why am I leaving
my friend, my family,
the people who love me –
leaving my inspiration, my city, my country?From my window
a wondrous sunrise,
the fresh sense of morning,
invaded my room
as I sat on the edge of my bed
wondering
how to say goodbye
to the one who always listened,
who heard my first word
who was my first world?A stream of tears fell
silently.
The hardest part began;
she knows I´m leaving, with
three minutes to tell her goodbye.
Enough time?
to say how much I love herA river of tears fell
silently,
my voice of broken words
couldn’t say goodbye.Three times, a lifetime,
my heart beating
stopped feelingHow could I say goodbye?"[11]
El poema de Mario (Traducción en español)
Una mañana calurosa de verano en el mes de agosto
sentado en el bordo de mi cama
sorprendido,
¿por qué estoy dejando
a mis amigos, mi familia,
a la gente que me ama-
dejando mi inspiración, mi ciudad, mi país?Desde mi ventana
Un maravilloso amanecer
la fresca sensación de una mañana,
invadió mi cuarto
mientras estaba sentado en el bordo de mi cama
sorprendido
¿Cómo decir adiós a quienes escuché,
a los que escucharon mi primera palabra
quienes fueron mi primer mundo?Un rio de lagrimas se derramaron
en silencio.
La parte mas difícil comenzaba;
ella sabe que estoy partiendo, con
tres minutos para decirle adiós.
¿ Suficiente tiempo?
para decirle cuanto la amo
un rio de lagrimas se derramaron
en silencio,
mi voz quebrantada
no podían decir adiós.Tres veces, toda una vida,
mi corazón latía,
se paró de sentir¿Como pude decir adiós?
En lo anterior vale la pena hacer un análisis respecto a la movilización repentina de una persona o grupo de personas a otro país en calidad de migrantes transnacionales, dejan sus raíces, familia, su gente, pero no el corazón del país al que pertenecen. Así como Mario, el niño que expresa de forma escrita su sentir al dejar su país que abandona, sin comprender por qué, y hacia dónde va. Este alumno, quien tal vez estudiaba en su país de origen y ahora al emigrar a otro país explora otra vida socio-cultural y educativa.
Lo anterior es una aproximación a la concepción de un alumno migrante transnacional, pero para comprender correctamente el transnacionalismo, es imprescindible recurrir a los puntos de vista de teóricos sobre este término. A esto Steve Vertovec señala:
"To the extent that any single ‘-ism’ might arguably exist, most social scientists working in the field may agree that ‘transnationalism’ broadly refers to multiple ties and interactions linking people or institutions across the borders of nation-states. Of course, there are many historical precedents and parallels to such patterns …Transnationalism (as long-distance networks) certainly preceded ‘the nation.’ Yet today these systems of ties, interactions, exchange and mobility function intensively and in real time while being spread throughout the world"[12]
Al grado de cualquier "ismo" como único podría cuestionablemente existir, la mayoría de los científicos sociales que trabajan en el terreno quizás estén de acuerdo en que "el transnacionalismo" generalmente se refiere a los múltiples lazos e interacciones que unen a la gente o instituciones a través de fronteras de nación-estados. Desde luego, hay muchos precedentes históricos y paralelos a tales modelos… el transnacionalismo (como redes de larga distancia) seguramente están precedidas por la "nación". Incluso, actualmente estos sistemas de enlaces, interacciones, intercambio y movilidad funcionan intensivamente en tiempo real mientras se extienden por todo el mundo.
A partir de la perspectiva del teórico, el transnacionalismo se refiere al vínculo e interacción entre personas o instituciones que rebasan fronteras entre una o varias naciones. Así en el caso de México y Estados Unidos la persona que pisa el suelo de otro país, se esta convirtiendo automáticamente en un sujeto transnacional. Es pues, un proceso por el que los migrantes construyen sus propios campos sociales y unen sus comunidades y grupos sociales con las de establecimiento. Por lo tanto, queda claro el alumno es migrante "…transnacional porque trasciende muchas de las fronteras que define el Estado – Nación…vive transitando constantemente sobre las líneas materiales, comerciales, políticas y educativas entre Estados Unidos y México"[13]
Los grupos de personas migrantes emigran a los Estados Unidos y se establecen en un lugar de destino. Esto conlleva a que se conformen comunidades transnacionales en territorio norteamericano. Así lo puntualiza Durand y Massey "las redes migratorias son conjuntos de lazos interpersonales que conectan a los migrantes con otros migrantes que los precedieron, así como con no migrantes en las zonas de origen y destino, mediante nexos de parentesco, amistad y paisanaje"[14]
Es así como se puede entender el flujo migratorio que se da entre México y Estados Unidos de forma cotidiana. Actualmente la situación económica de los Estados Unidos ha generado el retorno de un promedio de 500 niños y adolescentes al mes en los diversos estados de la República. A pesar de que en México existen programas de apoyo, como el Programa Binacional de Educación Migrante, que permite agilizar tramites administrativos para incorporar o reinsertar a los niños, niñas y jóvenes estudiantes en los sistemas de enseñanza mexicano, pero no existe un proyecto pedagógico que permita la transición al nuevo contexto educativo. Por lo tanto las mismas instituciones o sociedad actúan como medios de exclusión o inclusión de los alumnos transnacionales.
"Los alumnos migrantes transnacionales, por su parte, ante el hecho de enfrentarse a un doble proceso de exclusión, tanto en las escuelas estadounidenses como en las mexicanas, han desarrollado cierta versatilidad cultural que les permite moverse – no sin dificultades – entre esos dos estados nacionales, construir arraigos en ambos lados de la frontera y renegociar su pertenencia y sus identidades complejas en espacios transfronterizos"[15]
La transnacionalidad en los estudiantes, y los problemas que enfrentan al reinsertarse en el sistema escolar mexicano debe enfatizarse, debido a que los estudiantes que retornan a México poseen elementos culturales, idiomáticos, y la escuela como espacio de aprendizaje y socialización tiene que hacerlos sentir cómodos en su nuevo contexto educativo.
Vivir en otro lugar no significa precisamente que los migrantes pierdan su identidad o sentido de pertenencia. Estar expuesta a diversas culturas, va generar un reconocimiento cultural. Emigrar suele ser una decisión involuntaria, ya que la mayoría de las poblaciones lo hacen por razones económicas, en busca del bienestar ofrecido por el sueño americano.
"Vivir en otra parte significa estar constantemente inmerso en una conversación en la que las diferentes identidades se reconocen, se intercambian y se mezclan, pero no se desvanecen. En este sentido, las diferencias funcionan no necesariamente como barreras, sino más bien como signos de complejidad. Nuestro sentido de pertenencia, lenguaje y los mitos que llevamos en nosotros permanecen, aunque no ya como orígenes o signos de autenticidad capaces de garantizar el sentido de nuestras vidas"[16]
Se puede decir que los niños mexicanos al momento de partir hacia los Estados Unidos continúan su educación básica en los Estados Unidos, dependiendo de la edad, entran a un Middle School, que abarca grados 6 a 8 y por lo general son estudiantes de 11 a 14 o 15 años, o un High School, que va del grado 9 al 12, más o menos de 14 o 15 años hasta 18 años. Este tipo de situaciones migratorias hacen que los niños y los adolescentes experimenten dos contextos educativos probablemente diferentes. Para ejemplificar lo mencionado es necesario recurrir a la siguiente experiencia educativa de dos niños migrantes en los Estados Unidos.
"El pequeño Manuel y su hermana Juanita fueron inscritos a la escuela primaria del lugar, ya que era obligatorio el que los hijos de los migrantes atendieran la escuela y aprendieran a leer y escribir. En estos tiempos, el programa bilingüe consistía en ser castigado si se hablaban en español durante las clases, y los maestros americanos esperaban que los niños aprendieran el ingles sin ninguna forma de instrucción formal, ni método didáctico, solamente que lo escucharan y que lo hablaran"[17] (Historias de migrantes, 2008: 28)
Con esta breve historia se pueden conocer los obstáculos con los que tropieza el niño migrante transnacional, por una parte se encuentra un problema lingüístico y por otro el sistema educativo de Estados Unidos. De la misma forma lo revela la siguiente entrevista realizada a una jovencita Michoacán de 14 años, quien fue entrevistada en una escuela del estado de Carolina del Norte y comenta con una cara que demuestra ánimo;
"Cuando yo estaba en México, anduve en el kínder. Después del kínder entré a la primaria. Estuve en primero, segundo y medio año en tercer grado. En México, yo sentía que la escuela era fácil y unas cosas si estaban difíciles. Yo estuve en México por nueve o diez años. Cuando me vine para Estados Unidos no sabía hablar inglés, por eso una maestra de inglés me enseñaba. Yo entré a la escuela aquí en tercer grado. Después que entré una maestra me sacaba de clases para ir con ella, para que me enseñara a hablar inglés. La maestra me ayudó por dos años y medio. Hoy madamas voy con un maestro, pero para que me diga en que nivel estoy y hoy yo estoy contenta que puedo hablar inglés y estudio aquí y si puedo yo voy a seguir estudiando aquí o en México"[18]
Estudiantes michoacanos con experiencia en escuelas de Estados Unidos regresan a escuelas en México. Foto por Francisco Sixtos Niniz
Existe una gran similitud en las dos historias que mencionamos. Son niños o jóvenes que tienen experiencias educativas tanto en México como en Estados Unidos, por el hecho de haber sido participes en el fenómeno migratorio. La perspectiva como estudiantes migrantes revela que pasan por un proceso de transición de una escuela a otra, tal vez con mayores dificultades como lo es la lengua y la adaptación al nuevo contexto social y pedagógico.
De esta forma la escuela se debe considerar como un espacio abierto a la realidad, para que los niños y jóvenes aprendan a convivir interculturalmente, es decir crear una comunidad de aprendizaje para enriquecernos mutuamente. Haciendo una remembranza de que el movimiento migratorio de niños y jóvenes hace que como sujetos cognoscentes experimenten contextos educativos tanto en el plano nacional como internacional.
Notas
[1] CONAPO, "Migración México-Estados Unidos. Presente y futuro", 2000. p. 13
[2] Canales, Alejandro. "Periodicidad, estacionalidad, duración y retorno. Los distintos tiempos en la migración México-Estados Unidos", 1999, en papeles de Población, No. 23. p. 1
[3] Dean, M. "Ser migrante", en la Jornada, 1 de abril de 2008, México
[4] CONAPO, Op. Cit. p. 27
[5] Ibídem, p. 31
[6] Méndez y Mercado, Leticia. "Migración decisión involuntaria, Instituto Nacional Indigenista",1985. p. 17
[7]López, Castro. Gustavo. "Niños, socialización y migración a Estados Unidos en Michoacán, The Center for Migration and Development Working Papers Series – Princeton University, CMD Workin Paper #05 – 02d.
[8] Chambers, Lain. "Migración, cultura, identidad". Buenos Aires. Amorrortu. 1994, p. 23
[9] CONAPO, Op. Cit. p. 242
[10] López Castro, Op. Cit
[11]" Frey, Nancy, et al. "Productive Group Work: How to Engage Students, Build Teamwork, and Promote Understanding". USA, 2009, p. 114
[12] Steve Vertovec. "Conceiving and Researching Transnationalism". En Ethnic and Racial Studies, Vol. 22, No. 2, 1999, p. 2
[13] Tesis. Rodríguez, Atzimba. "Estrategias educativas de una comunidad transnacional: el caso de San Juan Mixtepec, Oaxaca. México, Universidad Metropolitana. 2000, p. 65
[14] Durand, Jorge. "Clandestinos. Migración México – Estados Unidos en los albores del siglo XXI", 2003, p. 31
[15] Secretaria de Educación Pública. "Alumnos transnacionales. Escuelas mexicanas frente a la globalización". México, 2008, p. 48
[16] Chambers, Op. Cit. p. 22
[17] CONAPO. "Historias de Migrantes 2008" México 2008, p28
[18] Entrevista realizada a estudiante de la East Yancey Middle School de Burnsville, Carolina del Norte originaria de Cherán, Michoacán. 8 marzo del 2010.
Datos para citar este artículo:
Francisco Sixtos Niniz. (2010). Migración de México a Estados Unidos de niños y jóvenes. Revista Vinculando, 8(2). https://vinculando.org/articulos/sociedad_mexico/ninos_jovenes_educacion_migracion_mexico_estados_unidos.html
Manuel Vidal dice
Creo que es un hecho que el fenómeno de la inmigración es uno de los problemas que afecta de manera considerable a varios estados de nuestro país, en México hay estados donde los hombres han optado por irse a EU con el fin de realizar el sueño americano, es por ello que este problema debe de afrontarse de manera enérgica y dando soluciones, me viene a la mente un artpicuo que leí hace un tiempo acerca de la Fundación Jaff donde tocan este tema aportando algunas soluciones, me parece primodial dar soluciones a este problema que tanto ha afectado a la niñez mexicana que, como bien sabemos, son de los primeros que van en busca de una mejor vida fuera de nuestro país. Saludos.