Sobre el concepto de Economía Social y Solidaria.
Con el propósito de ganar fuerza en nuestra identidad, el concepto mismo de economía social y solidaria nos conduce a una dualidad que conviene intentar definir en alguna forma; o mejor de muchas formas, toda vez que estos conceptos se están construyendo a partir de diferentes fuentes teóricas o doctrinales, e incluso geográficas, y de diferentes experiencias prácticas. Evidentemente las presentes notas no son un ejercicio académico y por tanto no son exhaustivo.
Por economía entendemos al conjunto de actividades encaminada a producir satisfactores del estómago, la mente y la reproducción (individual, social y de la producción), en razón de lo cual se lleva a cabo un proceso de intercambio entre diferentes agentes o actores, antiguamente vecinos, hoy de diferentes lugares territoriales, merced al crecimiento de la población y la ampliación del propio intercambio, quienes finalmente los consumen (lógica de las necesidades). Etimológicamente se entiende por ciencia económica a la disciplina encaminada a estudiar el mejor aprovechamiento de los recursos escasos.
En los actuales tiempos neoliberales (pero no sólo ahora) generalmente se confunde a la economía con la crematística; es decir, con una actividad orientada exclusivamente a producir o incrementar la riqueza (lógica mercantil): el concepto de economía social y solidaria con el que nos identificamos no es este último, es decir, el de la producción de riqueza, sino el de la producción y el consumo para satisfacer necesidades sociales.
Por sector social o de economía solidaria en nuestra realidad mexicana nos referimos en primer lugar de manera genérica a la actividad económica del llamado sector social definido por el artículo 25 constitucional. El sector social, se refiere a los que trabajan bajo alguna modalidad de forma asociativa, comunitaria, colectiva, cooperativa. Sin embargo, pensamos que dentro del sector social también debemos incluir a los que trabajan por cuenta propia, de manera individual o familiar, ya sea formal o informalmente.
El social es el sector más desfavorecido con las políticas neoliberales aplicadas desde la década de los ochentas. Ha recibido los mayores impactos negativos y prácticamente ninguno de los impactos positivos. Económicamente no es el que más aporta al PIB, porque en el contexto de la economía neoliberal y globalizada los que más aportan al PIB son los que están conectados con los circuitos de intercambio global, hacia la exportación y son los ganadores netos del proceso de apertura indiscriminada; pero en cambio el sector social es el que más población tiene; con la característica de ser el sector que proporcionalmente menor ingreso de PIB recibe; es decir, nos referimos a las comunidades indígenas, el campesinado pobre y medio, los pequeños y medianos productores/as individuales o asociativos del campo o la ciudad, las cooperativas, los obreros/as, los/as trabajadores/as por cuenta propia. Por tanto, la concentración y la exclusión son rasgos característicos del modelo económico vigente; esto es: mientras el 10 % más rico de la población concentra el 60% de la riqueza, el 90% de la población apenas accede al 40%
No es posible identificar por el momento con claridad qué es, cómo es, dónde está, cuánto produce, qué importancia relativa tiene cada forma de organización de la economía social en cada entidad federativa y por sector económico. Es decir, la información sobre el desempeño actual del llamado sector social de la economía en México es limitado y cuando existe información es parcial, como el caso de la producción campesina. Es necesario organizar información o cuanto menos adelantar hipótesis sobre el peso económico del sector social y solidario, su localización espacial y sectorial, sus rangos (menor-mayor), sus articulaciones y entrelazamientos, et.
El asunto de la definición conceptual y el dimensionamiento macroeconómico del sector social, es algo que evidentemente sigue pendiente en México. No se trata de mera curiosidad, es una necesidad vital saber las características que tiene el sector social para poder diseñar de manera certera y objetiva estrategias propias encaminadas a su fortalecimiento y para generar alternativas de políticas públicas.
Desde nuestro punto de vista el sector social incluye a la clase trabajadora, quien en su comportamiento social se desempeña como comprador/ra, por ser asalariada y recibir un ingreso a cambio de su trabajo que transforma en consumo y de esa forma se vincula económicamente con el resto del sector social. Sin embargo, en los circuitos de producción y consumo, ellos se encuentran determinados por el capital y no pueden tener un comportamiento económico realmente autónomo. Además de que las formas de consumo de la clase obrera mexicana, sobre todo en la mega área de la ciudad de México, está muy influido por el peso de la publicidad y la propaganda, con comportamientos de temporada y de modas, no de ciclo económico, como resulta con las actividades económicas en el campo.
Por otra parte, pensamos necesario incorporar el concepto de economía popular en nuestras definiciones porque tienen un carácter más íde clase"; pero en la práctica es similar al concepto de economía social. Por Economía Popular se puede entender la movilización y activación económica del mundo de los pobres, en búsqueda de solución autónoma a sus propias necesidades y carencias
Tipología de la economía popular:
Empresas asociativas (Organizaciones Económicas Populares, OEP)
Micro empresas
Iniciativas individuales
Soluciones asistenciales
Actividades ilegales
Niveles de la economía popular:
– Nivel de sobrevivencia: la actividad que permite apenas la satisfacción de necesidades básicas en términos de simple sobrevivencia fisiológica (por tanto, en condiciones de subnutrición, insalubridad, viviendas precarias y de emergencia, etc.)
– Nivel de subsistencia. la actividad permite la satisfacción de necesidades básicas pero no hace posible ninguna forma de acumulación y crecimiento
– Nivel de crecimiento: cuando las personas logran a través de la actividad económica un progresivo mejoramiento en su calidad de vida, valoran ciertos aspectos especiales de lo que hacen (libertad, autogestión, etc.) o adicionan actividades culturales y de capacitación que las potencian y les abren mejores posibilidades de éxito.
La economía popular empobrecida se hace cargo de su propia sobrevivencia, y escala paulatinamente una integración asociativa y autogestionaria.
La contradicción entre el capital y el trabajo ya no transita exclusivamente por las antiguas relaciones obrero-patronales, sino que intenta con la globalización una nueva competencia, esta vez entre empresarios/productores globalizados y empresarios/productores excluidos.
La economía popular sólo puede resistir, a cambio de competir con el régimen de producción y distribución capitalista globalizado, a través de un recorrido asociativo y autogestionario. Con ello queremos significar una realidad inexorable, la coexistencia entre una lógica económica basada en las necesidades y otra lógica económica basada en el mercado.
Entendemos por autogestión la gestión democrática o colectiva de los recursos por parte de los productores directos y en función de sus intereses y necesidades. Y entendemos por asociatividad, la unión de esfuerzos por parte de las unidades autónomas y organizados para beneficio común de los participantes.
En la economía popular la acumulación y la ganancia se convierten en un medio y el trabajo un fin (el trabajo desenajenado), a diferencia del capitalismo donde la acumulación, el excedente o la ganancia, son el fin principal, y el trabajo y la explotación el medi
o para con
seguirlo. De esta forma, en
el marco de la economía social y solidaria, los bienes y servicios son consumidos por el trabajo y en función del trabajo, y no producidos o consumidos por el capital y en función del capital.
Sobre dos circuitos: "satisfacer las necesidades" – "producir excedentes y acumular"
En economía podemos encontrar dos circuitos: uno encaminado a satisfacer las necesidades y otro encaminado a producir excedentes y acumular. El primero, el de las necesidades, generalmente tiene un lógica de reproducción simple; la producción de autoconsumo; la producción para satisfacer las necesidades vitales de quien produce, su familia o la comunidad; se produce para satisfacer las necesidades humanas y las necesidades de la reproducción de las condiciones de la producción; los excedentes se intercambian por los excedentes de otros productores o comunidades que no se tienen capacidad de producir por sí mismos. El otro circuito económico en donde la finalidad no es satisfacer necesidades, sino producir excedentes y ganancias a través de la producción de bienes orientados al mercado.
La lógica de uno no es la del otro: cuando la actividad económica está encaminada a satisfacer necesidades se produce de manera más racional, aprovechando capacidades existentes y cuidando los recursos naturales; la lógica mercantil tienen como fin la ganancia y tiende a producir excesivamente, por encima de las necesidades, creando por tanto desajustes, desequilibrios, en el mercado y en los recursos naturales.
Sobre la actual globalización y su crisis total.
Nos encontramos históricamente viviendo la fase superior del imperialismo capitalista, es decir, la globalización; el capitalismo ha nacido y se ha desarrollado a partir de ciclos y crisis; vivimos hoy la peor de todas las crisis; la más aguda y la más extensa; la última crisis dura ya treinta años y tiene un dimensión planetaria; su última fase abarca ya cuatro años; muestra de ello son los quebrantos en varios países asiáticos, incluyendo Japón, que disminuyeron sensiblemente su ritmo de crecimiento; los elevados índices de desempleo; la caída sistemática de los precios de las materias primas y los alimentos; la caída de los precios de muchos bienes de producción e inversión; la debilidad de las bolsas de valores del mundo; el surgimiento de situaciones extremas como el caso de Argentina; la situación financiera calamitosa de gran cantidad de trasnacionales, principalmente norteamericana y, finalmente, la guerra.
La crisis es total: abarca lo económico, lo social, lo político y lo ecológico; por ello se configura un escenario extremo; el capitalismo mundial ya no puede y la sociedad mundial ya no quiere seguir padeciendo los efectos indeseables de una crisis que no tiene solución verdadera y de largo plazo.
En México la crisis ha sido persistente y con tendencias al crecimiento y la agudización; el modelo neoliberal y las políticas de su inspiración que han sido aplicadas, han tenido consecuencias e impactos evidentes para la población en general, pero particularmente para la economía social, popular y solidaria; las tendencias adversas de mediano plazo (20 años) se han incrementado en los últimos cuatro (desaparición de unidades productivas, desarticulación de las cadenas productivas, debilitamiento del mercado interno, caída de los precios de las materias primas y los alimentos, desaparición de fondos e instituciones gubernamentales encaminadas a fomentar al sector social, vaciamiento del campo e incremento de la migración, agotamiento de suelos, contaminación y agotamiento de fuentes y cuerpos de agua, deforestación creciente, disminución de la capacidad adquisitiva del ingreso, quiebre de la banca, incremento de la deuda externa, devaluación sistemática de la moneda, etc.) .
Sobre dos ámbitos: el micro y el macro.
Finalmente queremos establecer dos ámbitos de desempeño de la economía social y solidaria: el micro y el macro. El micro abarca a los individuos, sus unidades familiares, las unidades económicas colectivas asociativas, cooperativas y comunitarias locales o territoriales, es decir, el ámbito local. Por macro nos referimos desde el ámbito municipal hasta el estatal, el nacional y el internacional. En los dos son decisivas las políticas públicas, que tienen un carácter macro (políticas comerciales y de inversión, gasto público, tipo de cambio, política de empleo y salarios, etc.); sin embargo, en términos del fortalecimiento de las unidades económicas del sector social y solidario, las estrategias y políticas son más de carácter micro (la organización, la eficiencia, los precios, etc.).
En el nivel macro, a la economía social y solidaria le interesa discutir el proyecto de país; el marco legal e institucional, las estrategias globales que favorecen a las trasnacionales principalmente, el uso y abuso de los recursos naturales, los planes de integración (TLC y PPP), el nivel y carácter de la crisis; en el nivel micro, a la economía social y solidaria le interesa discutir y conocer la integración, las articulaciones, las redes, las experiencias exitosa y los fracasos.
Algunas estrategias para discusión:
Fortalecimiento de la autonomía: búsqueda de formas que permitan disminuir la dependencia de gobierno y de los circuitos económicos meramente mercantiles.
Fortalecimiento de la integración horizontal y vertical autónoma (encadenamientos económicos)
Fortalecimiento de ejes articuladores (experiencias exitosas) o polos de desarrollo.
Definición de estrategias que permiten articular la lógica de las necesidades con la lógica mercantil.
Fortalecer las. formas cooperativas que son las más inmediatas y oportunas para organizar proceso y articulaciones de economía solidaria.
Fortalecer las experiencias de los mercados intercooperativos y/o intersociales.
Fortalecimiento de las capacidades de asistencia técnica, organización, capacitación y estudios, en clave social y solidaria.
Datos para citar este artículo:
Bernardo González. (2005). Notas sobre economía de la necesidad y economía mercantil. Revista Vinculando. https://vinculando.org/economia_solidaria/bernardo_ecosol.html
Paulina Mora dice
Hola, un agrado saludarles mi nobre es Paulina Mora, y soy estudiante de Socioeconomia en Chile, el motivo del presente correo es felicitarlos por la pag. a la cual he ingresado, es fundamental intentar conservar la identidad de nuestros pueblos, sobretodo en el mundo globalizado en el cual nos encontramos, por lo que el reencontrarse con vuestras raices es imprescindible para avanzar hacia una sociedad mas justa, junto con generar una conciencia social colectiva que nos permita separnos y luchar contra la economia de mercado imperante.
Aca en Chile la Socioeconomia no se encuentra desarrollada aun, existe sobre nuestras sombras un imperio que encontro la mejor manera de dominación para nuestro pueblo, pero no dudo que eso cambie junto con la percepción de la gente respecto a nuestra cultura…
bueno, me despido….
solidaridad entre los pueblos
yennifer teran dice
hola mi nombre es yennifer teran, soy estudiante de administracion de empresas, curso el segundo semestre.
Los felicito por tan excelente colaboracion con todas las personas que visitamos y consultamos su pagina web.
Aprovecho la presente para que me ayuden, necesito amplia informacion acerca de la economia de la produccion del mercado simple. como por ejemplo el concepto, su funcion, en fin toda la informacion que me puedan dar sobre esto.
Agradeciendo de antemano por su colaboracion y esperando pronta respuesta me despido
Vinculando.org dice
Yennifer,
Te saludamos con gusto de ver que nuestro trabajo te ha sido de utilidad :) y te comentamos que por el momento no tenemos la información que estás buscando. Por favor disculpa que no podamos ayudarte en ese tema, pero te deseamos buena suerte en tu búsqueda.