- Leer la primera parte: Biografía de Albert Einstein
- Leer la segunda parte: Albert Einstein y su concepto de socialismo
Resumen
El propósito del presente artículo es destacar el pensamiento de Albert Einstein acerca de la forma en que puede trabajarse el proceso educativo en la escuela. Se concluye que la forma de pensar de una conciencia tan brillante como la de él con relación a la educación debería ser revisada para implementarse en el sistema educativo de cada país.
Palabras clave: comportamiento humano-educación socialista-ética-Humanidad-moral-paz- Socialismo-sociedad internacional.
Abstract
The purpose of this article is to highlight Albert Einstein’s thinking about how the educational process can be worked on school. It is concluded that the mindset of a conscience as brilliant as his with about education must be revised to implement it in the educational system of each country.
Keywords: human behavior-socialist education-ethics-Humanity-moral-peace-Socialism- international society.
Introducción
Actualmente, la sociedad se encuentra, cuando menos parcialmente, enajenada, debido a la división del trabajo y a la ideología imperante como resultado de la competencia entre unos y otros para poder lograr el “éxito”, entendiéndose a éste como el poseer capital y propiedades. En las escuelas, no se realiza la praxis,[1] simplemente se forman ejércitos de trabajadores de quienes solamente algunos encontrarán empleo. Los jóvenes ven el éxito como la adquisición de bienes y no lo miden conforme a cuánto sirven a la Humanidad con su trabajo, eso genera que todos lo busquen, por cualquier medio, sin pensar en la naturaleza o en las demás personas.
De acuerdo con Gramsci, lo generado por el modo de vida, de pensar y de actuar, de la clase dirigente, ha sido racional mientras es conforme con el fin y no por costumbre, porque lo que existe ha tenido su razón de existir, ha servido, ha facilitado el desarrollo histórico y la vida. Si, en algunos lugares, ciertas formas de vida se han convertido en un obstáculo, solamente es cierto en ese lugar por la maldad y la ignorancia y no en todas partes. En todo hecho existen dos aspectos: uno racional conforme con el fin que desea alcanzarse y uno de moda que depende del aspecto racional, el cual tiende a deformar el fin deseado y genera hábitos y costumbres que no son racionales. Usar ropa es racional y cada determinada forma de vestir será por moda. [2] Por tanto, será racional y útil crear una forma nueva de educar y de vivir que interese a la sociedad para su beneficio.
Einstein hablaba de la importancia de la unión entre la Ciencia y la religión para la formación ética y moral de los estudiantes, como buenos ciudadanos y no el simple acumulamiento de contenidos que pueden encontrarse en los libros. La verdadera educación no significa instrucción. Esa tarea solamente corresponde a escuelas técnicas cuyo objetivo es que los estudiantes egresen con determinados conocimientos o habilidades. La educación debe lograr que las futuras generaciones crezcan unidas por los mismos ideales, logrando el bien común para la supervivencia decorosa de la humanidad. Somos seres que viven entre lo individual y lo social. Suponer que nuestras acciones pueden ir siempre pensando en lo social, debe ser el primer requisito para lograr un cambio. Se necesita de la sensibilidad de una nueva generación dispuesta a unir la fe espiritual con la razón y el deseo de una verdadera timocracia y una verdadera soberanía.
Se requiere dialogar con comprensión y tolerancia para sumar las voluntades individuales que se destruyen mutuamente y resulte la voluntad general y no una opinión particular. Se requiere, también, que no haya ninguna sociedad parcial en el Estado y que cada ciudadano opine exclusivamente según él mismo.[3] Es necesario generar redes de apoyo contra los diferentes tipos de violencia y fomentar la comunicación entre los espíritus, en virtud de la cual éstos se perciben mutuamente[4] y, así, ir uniendo a la sociedad. Por tanto, las escuelas pueden y deben educar a los estudiantes para vivir unidos cooperativamente en sociedad y no como hasta ahora se ha hecho y que consiste en vivir desunidos en competencia unos con otros. Porque lo más necesario para lograr cambiar la situación actual es la fuerza, pero una fuerza permanentemente organizada y predispuesta, por tanto, es un deber de las escuelas: formar, desarrollar y hacer cada vez más homogénea, compacta y consciente de sí misma a esta fuerza.[5]
Pensamiento acerca de la educación socialista
No se trata de enseñarle las ciencias, sino de que se aficione a ellas y proporcionarle métodos para que las aprenda cuando se desarrollen mejor sus aficiones. He aquí el principio fundamental de toda buena educación.[6]
Si todos formamos parte de una misma sustancia, entonces ¿Por qué no se puede vivir en paz? ¿Acaso el destino de todas las razas en cualquier época es tener que vivir peleando? ¿Realmente el precio de la paz, la libertad y el derecho es tener demasiada seguridad? entendiendo ésta como control y poder político y económico, además de contar con un poderío de armamento para someter a otras naciones, teniendo que existir siempre, no solamente la distinción de clases en una misma nación, sino, la distinción de razas o nacionalidades, viéndose unos superiores a otros y, por tanto, tener que existir vencedores y vencidos, amos y esclavos, burgueses y proletariado, gobernantes y gobernados, personas que tienen demasiados bienes tangibles e intangibles y aquellos que no tienen ni lo mínimo suficiente de acuerdo con la base de la pirámide de necesidades de Maslow, me refiero al aseguramiento para cada persona de una vivienda donde descansar y los medios para tener una buena alimentación. Existen personas que quisieran producir, pero no tienen los medios de producción necesarios para hacerlo, otros, desconocen métodos para aprovechar los recursos mínimos con los que cuentan.
Por otra parte, la historia ha mostrado que los líderes de las naciones, por su ambición, utilizan sus ejércitos y su población civil en contra de otras naciones o de sus propios ciudadanos, estableciendo un estado de miseria para aquella parte de la población que son mayoría, pero no tienen el poder de decidir sobre la forma de vida que merecen y desean, lo que ocasiona la integración del pueblo en movimientos civiles o revoluciones que a veces son tranquilizadas a través de la violencia por quienes ostentan el poder y, en otras ocasiones, logran su cometido de establecer un nuevo gobierno, el cual, por la misma ambición del nuevo grupo y la falta de constancia en los ideales que lograron el cambio, ocasiona que nuevamente haya esa desorganizada forma de vivir.
La violencia siempre existe, emplea los mismos medios y persigue los mismos fines, pero sólo en contra de aquellos que se resisten al derecho.[7] Einstein pensaba que era posible y humano lograr la paz y, si realmente se desea la seguridad, el bienestar y el libre desarrollo del talento de todos, se encontrarán los medios para lograrlo y, aunque pocos luchen por esos fines, con el tiempo, su superioridad terminará por imponerse.[8] De igual manera, pensaba que la personalidad se forma por el contorno donde el hombre se encuentra en su desarrollo, las estructuras de la sociedad, las tradiciones y la valoración de tipos particulares de conducta.[9] Sobre esto, se puede afirmar, que la conducta actual de la gran mayoría de las personas es inaceptable. La decadencia de los valores, es reflejo de la educación. No me refiero solamente a la escuela, sino, a todos aquellos medios que educan al hombre y cambian su ideología. La representación del mundo está deformada por los imperativos de la estructura social: la forma de vida política y económica, la división del trabajo, la poca cooperación social y la información existente. Además, en una sociedad dividida por clases, la ideología, sirve para mantener el estado de explotación-beneficio porque sirve para la cohesión de la sociedad pero, también, para asegurar la dominación de una clase por otra. Las personas en el proceso de interpelación, asimilan una ideología que las controla sin darse cuenta y todo queda en el nivel de la subconsciencia. Althusser utiliza en la categoría Estado, conceptos ocupados por Gramsci como estructura y superestructura. Para Althusser, en la superestructura, el Estado ejerce su hegemonía sobre los aparatos represivos y los aparatos ideológicos del Estado (AIE). Los AIE son la escuela, la iglesia, la familia, el sindicato, el partido político, los medios masivos de comunicación y de transmisión de la cultura, entre otros. Su misión es que la ideología de la clase dominante sea asimilada para conseguir la sumisión y el control de las clases dominadas. El Estado las controla para reproducir las fuerzas productivas y las relaciones de producción capitalistas existentes. Por tanto, en las escuelas, los estudiantes aprenden solamente las técnicas y los adiestramientos necesarios para cubrir un puesto laboral y las reglas de respeto necesarias para seguir manteniendo la división de trabajo. La escuela puede transmitir valores morales y religiosos, si en realidad lo desea y es el mejor AIE porque puede transmitir la ideología de distintos AIE y tiene una supuesta neutralidad, en cuanto no cuenta con ideología de manera consciente.[10] Hitler pensaba que la opinión pública tiene su base en grado mínimo en la experiencia y en los conocimientos del individuo y depende más de la idea que el individuo construye de las cosas a través de la información que obtiene y, por tanto, la masa actúa por el poder de la oratoria y la prensa como máquina de instrucción colectiva, tenía como función la instrucción política, llamada propaganda, que crea cierto ambiente de opinión, haciendo que algo insignificante se convierta en una cuestión muy importante para el Estado y, al contrario, que la masa no piense en cosas que sí son relevantes o las olvide, además, puede generar la popularidad en una persona para generar increíbles expectativas públicas o, bien, para convertirlas en un símbolo de villanía o de infamia;[11] función que hoy corresponde principalmente a la televisión.
El Estado educa y forma al hombre colectivo conforme con las necesidades del aparato económico de producción por medio del derecho, cambiando la humanidad: sus costumbres, sus modos de pensar y de actuar.[12]
Ozollo, denomina formas particulares de la producción a quienes realizan la función de enajenación y explica que, para superarlas, es necesario dar la vuelta del hombre desde esas mismas formas particulares de la producción.[13] Lo anterior es similar al pensamiento de Covarrubias en cuanto que la activación de la conciencia se logra mediante la información enviada constantemente por diversos modos de apropiación y aparatos de hegemonía como la escuela, buscando formar una nueva fuerza que devenga en contra-hegemonía. Es decir, la hegemonía de los aparatos ideológicos puede ser superada con la contra-hegemonía de los mismos aparatos ideológicos. La escuela socialista debe ayudar a educar al hombre colectivo conforme con las necesidades de la sociedad y el bienestar común y no como la escuela capitalista que se ha limitado a ser una guardería familiar incapaz de generar educación y en conjunto con las demás instituciones sociales, en especial, con la televisión, solamente crea hombres acríticos, consumistas, que piensan poco y consumen mucho, lo que Marcuse denominaba: hombres unidimensionales.[14]
La sociedad, debe pensar en la posibilidad de la transición y la ulterior extinción del Estado[15] y, posteriormente, accionar para llevarlo a cabo y no solamente culpar a los AIE por controlar la voluntad humana, pues quienes actúan mal son las personas y la coerción existe para quien no la acepta, no para quien la acepta.[16]
En 1944, Einstein reflexionó que, desde el comienzo, se pensaba que lo cognoscible era posible mediante la reflexión y que autores como Platón, Spinoza o Hegel, pensaban así. Einstein consideró que Russel contradijo que las cosas son lo que se percibe a través de los sentidos (realismo ingenuo); Berkeley agregó que no eran los sentidos, sino la conexión causal que provoca la presencia de las cosas; Hume agregó que la materia prima sensorial puede llevarnos a la fe y a la esperanza, pero no al conocimiento; posteriormente, Kant determinó que el conocimiento empírico nunca es seguro, sino que debe tener su base en la razón. Para Einstein, analizando a Galileo y a Hume, el empirismo era una fuente de conocimiento, pero tenía también filiación con el idealismo[17] porque dijo estar convencido que los conceptos surgidos en nuestro pensamiento y las expresiones lingüísticas, no pueden inducirse a través de los sentidos, sino, nacen de la experiencia a través de la abstracción, es decir, a través de la omisión de una parte de su contenido y el miedo a la metafísica ocasiona que se conciba un objeto como una masa de cualidades que deben obtenerse por los sentidos.[18] En complemento de lo anterior, puede decirse que, para “…la dialéctica materialista el todo es accesible al hombre como un todo y es necesario que lo concreto se vuelva comprensible por medio de lo abstracto, el todo por medio de la parte.”[19]
De acuerdo con Reimers y Chung, se requiere de una educación relevante para la vida de los estudiantes, tarea que requiere conciliar diversas perspectivas en la definición de los objetivos de la educación de acuerdo con los problemas y las oportunidades que merezcan la atención de las escuelas para definir los marcos curriculares o estándares y el currículo necesario. Mencionan que, paradójicamente, mientras se percibe la educación como algo importante, la confianza en la escuela está disminuyendo y que los análisis del mercado de trabajo en Estados Unidos muestran que, en los últimos cincuenta años, el número de empleos que requieren actividades manuales de rutina e, incluso, tareas cognitivas rutinarias ha disminuido drásticamente, mientras que los empleos que requieren tareas analíticas e interpersonales no rutinarias han aumentado. Mencionan que la UNESCO publicó, en 1972, el informe Faure en el cual argumenta la necesidad de la educación para toda la vida que desarrolle capacidades para el funcionamiento efectivo y la participación en la sociedad y, en la última década del Siglo XX, encargó a Jacques Delors, ex presidente de la Comisión Europea, encabezar la preparación de un informe en el que se esbozara un marco para la educación en el Siglo XXI donde se sostuvo que los cuatro pilares de la educación deberían ser aprender a conocer, a hacer, a ser y a vivir juntos y, posteriormente, a comienzos del Siglo XXI, la Organización de Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) emprendió dos iniciativas en los Estados miembros de la OCDE: el programa de Definición y Selección de Competencias (DeSeCo) y el Programa de Evaluación Internacional de Estudiantes en las áreas de alfabetización, matemáticas y ciencias (PISA).[20] Lo anterior, nos presenta la clave del porqué debe retomarse la propuesta de Einstein y poner mayor énfasis en el desarrollo del pensamiento crítico mediante el uso de la razón y de las relaciones sociales a través de la ética y la moral en los estudiantes para lograr la transformación de la sociedad de una que tiene mayor interés por el desarrollo del capital a una que el mayor interés sea el bienestar común de la Humanidad y, que esto sea el objetivo principal de la educación escolar ya que cuando el entorno es demasiado alterado, el ancla que puede evitar que el barco se desvíe, es la educación.
Einstein pensaba que el mal del sistema educativo es que se inculca en los estudiantes una actitud competitiva exagerada, entrenándolos para adorar el éxito codicioso como preparación para su carrera futura. Proponía el establecimiento del socialismo y un sistema educativo socialista porque con esta educación, el individuo desarrollaría sus capacidades naturales y un sentido de responsabilidad para con los demás miembros de su comunidad, en lugar, de la glorificación del poder y del éxito que se da en nuestra sociedad actual.[21] Esta concepción no era puramente idealista porque llevaba consigo la finalidad de lograr un cambio real y retomando a Gramsci, en sentido común, “…se llama materialismo a todo aquello que tiende a encontrar en esta tierra y no en el paraíso, el fin de la vida.”[22]
En 1939, Einstein dijo que era posible cruzar océanos, volar, comunicarse a grandes distancias, entre otras cosas, pero no se había logrado vivir con una producción y una distribución de bienes de manera organizada, lo que ocasiona que todos vivan infelices y temerosos de verse eliminados del ciclo económico o ser asesinados por otro ser humano.[23] Einstein pensaba que la perfección de medios y la confusión de objetivos, parecía ser la característica de su época, [24] sin embargo, parece ser la característica de siempre. De manera similar, Dewey pensaba que la inteligencia se limita a todo aquello que tiene relación con la producción y la comercialización de mercancías y el fracaso de la educación de no tomar en cuenta a los factores sociales es la ausencia de espíritu y una distorsión de la vida emocional.[25]
Los jóvenes estudiantes tienen diferente conciencia por lo que, un proceso de enseñanza o de aprendizaje, puede crear diferentes niveles de intelecto y no puede suponerse alcanzar una equidad real, ni mucho menos pensar que esta equidad significa educación de calidad. La calidad realmente aplicable a la educación escolar, es formar ciudadanos con una conciencia social que los ayude a reformar la sociedad para el bien común.
Algunos están de acuerdo en que las relaciones sociales y toda la estructura social están determinadas por la economía, es decir, que las relaciones humanas son causadas por el beneficio que una persona puede obtener de otra y, por otra parte, están quienes no lo conciben así. El socialismo planteado por Marx y Engels ha sido criticado por personas que no están de acuerdo en lo planteado en su materialismo histórico. Gramsci menciona que, en un artículo de 1930, se manifestaba que en el marxismo, la masa obedece a las necesidades e intereses económicos porque las personas actúan conforme con el dar y el tener y que eso es completamente falso porque los pueblos no solamente se guían por interés inmediato, sino también por los sentimientos y, por tanto, el materialismo histórico es una tontería donde las naciones obedecen a consideraciones dictadas por un deseo y una fe ardiente de prestigio.[26] Hitler pensaba que las fuerzas que crean y sostienen un Estado son el espíritu y la voluntad de sacrificio del individuo en pro de la colectividad y que estas virtudes nada tienen de común con la economía porque el hombre no se muere por negocios, pero sí por ideales.[27] De hecho, no es una tontería, puesto que siempre han existido relaciones sociales por simple interés. De acuerdo con Aristóteles, el hombre es un animal social naturalmente formado para la convivencia y las personas pueden relacionarse o tener una amistad por interés, por placer, por superioridad o por virtud. En las primeras tres formas, la relación termina cuando desaparece la conveniencia, es decir, cuando uno deja de obtener el provecho que tenía del otro; estas relaciones se dan en los malos o en un bueno y un malo y pueden generar adulación por parte de quien espera obtener algo que necesita. En la relación por virtud, ambos desean cada uno el bien del otro por el otro mismo, no en virtud de una afección, sino, por una disposición de carácter y existe la igualdad y la justicia; este tipo de relación sólo se da en los buenos. La amistad de los que son útiles o gratos, el uno para el otro, dura mientras se suministran mutuamente placer o provecho y se da entre contrarios, sobre todo, en la amistad por motivos de interés, por ejemplo, entre pobre y rico o entre el ignorante y el sabio, porque uno aspira a aquello que le hace falta y ofrece en compensación otra cosa. Sin embargo, es posible que lo contrario no desee a su contrario, sino, al término medio que para Aristóteles significa la virtud que no es el exceso ni el defecto. El término medio es lo que es bueno y lo que dice la recta razón. Por ejemplo, entre el miedo y la osadía, la virtud está en el valor, el que se excede por osadía es temerario y el que se excede en el miedo es cobarde y ninguno de ellos es virtuoso. En el trato, la convivencia y el intercambio de palabras y acciones, existen personas que alaban todo y no se oponen a nada porque creen que su deber es no causar molestia alguna a aquellos con quienes conviven y, otros, por el contrario, se oponen a todo y no se preocupan lo más mínimo de no molestar; los primeros se nombran descontentadizos y los segundos discutidores y ninguno de los dos es virtuoso. La virtud es lo intermedio, aquel que admite o desaprueba lo debido y como es debido, disposición que no había recibido nombre, pero se parecía a la amistad. Según Aristóteles, en las comunidades los hombres se asocian siempre con vistas a algo que les conviene y para procurarse algo de lo que se requiere para la vida y la comunidad política parece haberse constituido en un principio y perdurar por causa de la conveniencia.[28]
Einstein pensaba que debían modificarse los sistemas de enseñanza hacia un plano ético insustituible, donde no se inculque la competencia entre los individuos, sino, la ayuda mutua, la inteligencia, el carácter y la razón. Después de todo, aprendemos nuestra existencia por la reflexión o sentido interno y la de los otros espíritus por la razón.[29]
La escuela se ha encargado de establecer lo que el estudiante debe hacer, limitándolo a obedecer órdenes. Einstein proponía, entonces, no darle más importancia al intelecto que a la personalidad porque el intelecto no puede guiar, sólo servir. Pensaba que el intelecto considera métodos e instrumentos, pero es ciego para los fines y los valores y que esta ceguera se transmite de los viejos a los jóvenes y desarrolla la generación actual.[30] De igual forma, Gramsci pensaba que la escuela es un aparato de cultura que instruye y educa a los estudiantes donde la generación adulta transmite a la generación joven toda la experiencia de las generaciones pasadas y les inculca determinadas inclinaciones y hábitos[31] y menciona como buen ejemplo a tomar lo dicho por el director Gläser que la educación debe consistir en desarrollar y liberar el alma individual de los estudiantes, ofreciéndoles todas las posibilidades de manifestarse.[32]
De acuerdo con Rousseau, los estudiantes deben formar su razonamiento y su personalidad porque, para lograr que tengan una razón sana, es necesario que formen sus propios juicios en lugar que los maestros les dicten los suyos y, así, realicen las acciones por la razón y no por obligación, porque las cosas y las virtudes hechas por imitación las pueden realizar hasta los monos y, por tanto, una buena acción realizada no porque lo es, sino, porque la realizan los demás, no es moralmente buena. Sin embargo, cuando son niños es importante inculcarles los hábitos que se desea que adquieran mediante la imitación de los actos hasta que vayan adquiriendo el discernimiento de porqué debe ser así; por eso es tan importante que los trabajadores de la educación eduquen con su ejemplo, haciendo las cosas en presencia de los estudiantes, en lugar de imponer las obligaciones que se deben seguir.[33] Rousseau pensaba que la verdadera educación consiste menos en preceptos que en ejercicios.[34] Según Kant, el ingenio sin juicio hace grandes necedades; el entendimiento, es el conocimiento de lo general; el juicio, es la aplicación de lo general a lo particular y la razón, es la facultad de comprender la unión de lo general con lo particular.[35]
De acuerdo con Aristóteles, los principios son descubiertos por inducción, por percepción o por hábito y pensaba que los razonamientos que parten de los principios difieren de los que conducen a los principios y se debe empezar por las cosas más fáciles de conocer por sí mismo y en absoluto. Pensaba que toda enseñanza parte de lo ya conocido y decía que, para Hesiodo, el mejor de todos es aquél que, por sí sólo, comprende todas las cosas, el que obedece al que aconseja bien es noble, pero el que ni comprende por sí mismo ni retiene en su mente lo que escucha de otro, es un hombre inútil. Para Aristóteles, el hombre feliz vive bien y obra bien y la virtud humana no es física, sino del alma y la felicidad es una actividad del alma y existen dos clases de virtudes: la dianoética y la ética. La primera se origina y desarrolla por medio de la enseñanza, la experiencia y el tiempo y la ética se origina no por naturaleza, sino por la costumbre. La sabiduría, la inteligencia y la prudencia son dianoéticas, la liberalidad y la templanza, éticas. Los hábitos dignos de elogio se llaman virtudes, las cuales no se producen ni por naturaleza, ni contra naturaleza, sino, por tener aptitud natural para recibirlas y perfeccionarlas mediante la costumbre pues, practicando la justicia, nos hacemos justos, practicando la templanza, templados y, practicando la fortaleza, fuertes. Los hábitos se engendran por las operaciones semejantes. Es importante adquirir desde jóvenes buenos hábitos. Por causa del placer hacemos lo malo y, por causa del dolor, nos apartamos del bien. De ahí la necesidad de ser educado de cierto modo desde jóvenes, como pensaba Platón, para poder complacerse y dolerse como es debido y, en esto, consiste la buena educación. Para Aristóteles todos son buenos y los malvados desconocen lo que deben hacer y aquello de lo cual deben apartarse y, por la ignorancia de alguna circunstancia, son injustos y malos en su actuar y las actividades, específicamente, diferentes serán perfeccionadas por cosas, concretamente, diferentes. Él pensaba que la felicidad no es la diversión, sino el trabajo porque afanarse y trabajar para obtener diversión parece necio y pueril, pero divertirse para trabajar después es correcto y, entonces, el descanso, no es un fin, sino lo que resulta de la actividad. Por tanto, la vida feliz es la que es conforme con la virtud más excelente, la mejor que hay en el hombre, la más divina que hay en nosotros que es el entendimiento, además, del esfuerzo y no del juego y, por eso, la vida conforme con la mente es la más feliz. De acuerdo con él, la educación, las costumbres y en general toda la vida, deben regularse por leyes para formar hábitos por que los hombres obedecen más a la necesidad que a la razón y a los castigos que a la bondad. Se debe educar desde la juventud y practicar lo aprendido para acostumbrarse a ello.[36]
Para Einstein, era necesaria la solidaridad de todos los hombres y pensaba que el ejemplo de ello, eran las reivindicaciones socialistas planteadas, en mayor parte, por judíos.[37] Recordemos que Marx, Lenin, Trotsky, entre otros, fueron judíos.
Para Einstein, el hombre adquiere la cultura de la sociedad donde vive porque ésta influye en su conducta, en sus pensamientos y sus deseos conscientes, pero los hombres no están condenados por constitución biológica a aniquilarse entre sí.[38] Rousseau mencionaba 3 tipos de educación: la de la naturaleza que es el desarrollo de nuestras facultades y nuestros órganos, la humana que se obtiene por medio de enseñanzas y la de las cosas que se adquiere por la experiencia propia. Él decía que desde que nacemos, estamos afectados por los objetos que nos rodean y que lo esencial está en ser bueno con las gentes con quienes se vive. También diferenciaba al hombre natural, cuyo valor, es absoluto consigo mismo con el hombre civilizado, cuyo valor, se mide en su relación con el cuerpo social.[39]
La paz no se ha logrado porque la ideología dominante es la de competir y ganar y no la de ayudar y servir. Por tanto, la educación requiere formar seres conscientes de las necesidades sociales, hombres éticos que sirvan a la sociedad en lugar de servirse de ella, seres racionales y no simples instrumentos de trabajo futuro que luchan por un éxito capitalista basado en el placer. El requisito entonces, es educar a las próximas generaciones para la renovación social.
Infeld, menciona que, en el ensayo de Einstein de 1929, titulado El mundo tal como lo veo, escribió que lo más hermoso que se puede experimentar es el misterio como fuente de todo arte y toda ciencia y quien es incapaz de detenerse para maravillarse y sentirse transportado por un sentimiento reverente, vale tanto como un muerto y sus ojos están cerrados.[40] En 1953, Einstein escribió que la “…alegría de mirar y comprender es el don más bello de la naturaleza.”[41] Esa falta de emoción por aprender cosas nuevas o desconocidas, crean una persona que solamente piensa y procura para sí misma y no reflexiona ni acciona en favor de los demás y, por tanto, no observa ni busca la solución a los problemas de su entorno y demás pueblos. Lo importante es no dejar de cuestionar, la curiosidad tiene su propia razón de existir. El hábito mata la imaginación y sólo lo nuevo la despierta porque en lo cotidiano no actúa la imaginación, solamente actúa la memoria Ab assuetis non fit passio (de lo familiar no tiene lugar la pasión). Cuando un estudiante pregunte algo, se le debe contestar sólo lo necesario para entretener su curiosidad, no para satisfacerla. No se debe proponerle al estudiante lo que ha de aprender, sino, lograr que él tenga el deseo, que indague y proporcionarle los medios para lograrlo.[42] Se debe intentar, cada día, entender un poco más los misterios del Universo.
Einstein decía que los judíos tienden hacia el conocimiento con una actitud moral de justicia e independencia personal y decía que el desprecio hacia ellos es por parte de quienes se rebelan contra los ideales de la razón, la libertad individual y quienes por medio de la violencia generan la esclavitud del Estado y, por tanto, no quieren que el pueblo sea ilustrado por estos intelectuales quienes no aceptan dogmas sin crítica y como ejemplo la quema de libros realizada por los nazis cuando llegaron al poder.[43] Los fines son concebidos por personas con ideales éticos superiores y adoptados por la masa de seres humanos que de manera semiinconsciente, determinan la lenta evolución de la sociedad.[44]
Alfredo Llanos, probablemente tomando en cuenta que Einstein concebía la unión entre la Ciencia y la religión para el mejoramiento de la educación escolar, menciona que existe la coincidencia que, en la ciudad de Ulm, donde nació Einstein, el filósofo francés Descartes en noviembre de 1629, tuvo tres sueños misteriosos que algunos intérpretes tradujeron como la unidad de la Ciencia sobre una base espiritual.[45] Esto sucedió la noche del 10 de noviembre de 1619.[46] En un discurso titulado Olympica que constaba de doce páginas, en una nota al margen, Descartes escribió: XI. Novembris 1620. Coepi intelligere fundamentum Inventi mirabilis (11 de noviembre de 1620. Empecé a comprender el fundamento del descubrimiento maravilloso). Texto inexplicable, ni siquiera por Claude Clerselier quien fue amigo, corresponsal, traductor, editor y heredero de las obras de Descartes, pero puede significar la comprensión, después de un año, de la Ciencia maravillosa, al tener relación con otro texto de Descartes en latín: X. Novembris 1619. cum plenus forem Enthousiasmo, et mirabilis scientiae fundamenta reperirem (10 de noviembre de 1619. Con plena confianza y entusiasmo y, el fundamento de la ciencia maravillosa apareció).[47]
Einstein decía que la Ciencia es el pensamiento sistemático y metódico de los fenómenos perceptibles del mundo, a través de la conceptualización, encaminado a la determinación de conexiones normativas entre nuestras experiencias sensoriales, estableciendo normas generales de objetos y hechos en el espacio tiempo y la religión es aquella que sirve para eliminar deseos egoístas, provocando buenos sentimientos y aspiraciones y prescribir amor fraterno entre los individuos. Él concebía que el pensamiento inteligente ayuda para la formación de objetivos y juicios éticos y la religión nos proporciona un sentido de los fines últimos y fundamentales y, si se pudiera separar a ésta de su forma religiosa y quedara solamente su aspecto humano, se podría lograr el desarrollo libre y responsable del individuo al servicio de la Humanidad.[48] Esto significaba eliminar la idea de Dios con sus oraciones y súplicas para obtener deseos y, así, eliminar la fuente de miedo y esperanza y apelar a fuerzas que sean capaces de cultivar el bien, la belleza y la verdad, porque la auténtica religión resulta dignificada y más profunda por el conocimiento científico y la verdadera religiosidad no pasa por el miedo a la vida y a la muerte y la fe ciega, sino por la lucha en favor del conocimiento racional. Debe lograrse que los estudiantes actúen conforme con la razón humanamente posible y que no piensen que las acciones buenas sólo son logradas por seres sobrenaturales o inexistentes, puesto que “…los mandamientos de Dios obligan cuando y como las leyes humanas lo dictaminen.”[49] De esta manera, no se divinizaría a una nación, a una clase, ni tampoco a un individuo y se lograría el fin superior del individuo que es superarse y servir más que regir. La función de la educación escolar debe ser formar, en el estudiante, un espíritu tal que esos principios sean para él como el aire que respira. La Ciencia la crean quienes tienen un deseo de alcanzar la verdad y de comprender las cosas, sentimiento que surge de la religión, por eso, la Ciencia sin religión es coja, la religión sin Ciencia es ciega.[50]
Kant ya había planteado que es necesario enseñar a los niños a aborrecer el vicio, pero no porque lo haya prohibido Dios, sino porque es aborrecible por sí mismo y, además, enseñarles que la verdadera veneración hacia Dios consiste en obrar bien y convertirse en un hombre mejor y no consiste en hacer alabanzas, súplicas o predicando sus salmos. Pensaba que debe unirse la religión con la moralidad para ser efectiva pues cuando la religión no procede de la conciencia moral, queda sin efecto y se vuelve un simple culto supersticioso.[51]
Einstein pensaba que, en todas partes, se buscaba el éxito a expensas del prójimo, inclusive en las escuelas y universidades, se destruían los sentimientos de cooperación y fraternidad, haciendo que los estudiantes concibieran el triunfo como algo que nace de la ambición personal y del temor al rechazo, lo cual se podría evitar si se inculcara una forma de vida fundada en la moderación y la cooperación. Las nuevas tecnologías no ayudan en esta labor y algunas dividen más a los hombres porque la aniquilación de obstáculos no conduce, por sí sola, a un ennoblecimiento de la vida social e individual, se necesita una estructuración moral de la vida comunitaria. Por tanto, se debe enfocar al hombre frente a la naturaleza en su conjunto, establecer ideales para la vida individual y comunitaria y las mutuas relaciones humanas. Einstein pensaba que el énfasis excesivo en lo intelectual de la eficacia y lo práctico, en la escuela, conduce al debilitamiento de los valores éticos y, por tanto, no debería importar tanto el progreso técnico a la especie humana, lo que debería importarle es la consideración mutua y las relaciones entre los hombres que se están perdiendo, algo que resulta al establecer un sentimiento cordial y fraterno en la alegría y la aflicción, lo cual, es una fuente de acción moral que crea la religión cuando se ha purificado de elementos supersticiosos.[52]
Althusser, de igual manera, pensaba que la educación no basta sin el recurso de la religión, es decir, de la ideología religiosa, pero concebida como religión civil o, sea, en su función de ideología moral y política.[53] Ozollo dice que el problema no es la religiosidad individual, sino la religión de Estado y, por tanto, es necesario transferir el problema religioso del derecho público al derecho privado, del ámbito del Estado al ámbito civil.[54]
Dewey pensaba que lo que es o no es valioso, para un individuo, se debe a normas, de las cuales, no tiene conciencia en absoluto. Dewey pensaba que el ambiente puede influir en:
- El lenguaje, es decir, el modo de hablar y el vocabulario utilizado por el niño.
- Las maneras que son generadas por el ejemplo más que por el precepto, como respuesta a estímulos habituales y no por medio de la instrucción, la cual solo sirve en el grado en el que coincide con el hacer y el hablar de los que constituyen el ambiente social del niño.
- El buen gusto y la apreciación estética que son desarrollados por los objetos, formas y colores habituales en el ambiente y por lo cual es importante que el niño crezca en un lugar ordenado, limpio y seguro.
- Los juicios de valor estructurados por las situaciones en que una persona se encuentra habitualmente.
Por tanto, pensaba que en el proceso educativo debe controlarse el ambiente para educar indirectamente mediante hábitos de vida y de trato escogidos, es decir, que la escuela debe ofrecer un ambiente simplificado que haya sido seleccionado cuidadosamente para generar en los estudiantes una reacción positiva sobre la base de materiales y métodos que promuevan el desarrollo hacia una dirección deseada y eliminar los rasgos perjudiciales o lo indeseable y así tratar que cada individuo tenga la oportunidad de ser libre de las limitaciones del grupo social donde nació. A esto lo denominó educación intencional. Dewey pensaba que el fin de la escuela debe ser lograr una sociedad más ilustrada que comprenda que es responsable no sólo de transmitir y conservar el conocimiento existente, sino también de lograr a través de este conocimiento una sociedad futura mejor, que no solamente se conciba de manera retrospectiva sino también prospectivamente, es decir, que se utilice el pasado como un recurso para desarrollar el futuro. Debido a que la sociedad está compuesta de muchas sociedades conexionadas, la escuela debería generar un ambiente homogéneo y equilibrado para coordinar las diversas influencias de los diferentes ambientes sociales y el valor de la educación escolar debería ser crear el deseo de crecimiento continuo, proporcionar los medios para hacer realidad este deseo y eliminar el aislamiento y exclusividad de ciertos grupos o círculos restringidos que ponen de relieve un espíritu antisocial.[55] Por tanto, debemos concebir un lugar donde no existe competencia entre diferentes escuelas o sistemas educativos que compiten por tener mayor prestigio, donde no exista competencia entre maestros que luchan por no perder su trabajo u obtener un mejor puesto que le proporcione un mejor salario o entre estudiantes que compiten por obtener una calificación mayor, sino la existencia de la cooperación entre diversos individuos que luchan unidos por obtener conocimientos que sirvan para construir un mundo mejor para todos.
Einstein, en 1945, pensaba que el socialismo debería ser internacional hasta lograr un gobierno mundial que controlara todo el poder militar porque, de no ser así, podría provocar una guerra con mayor facilidad que el capitalismo. Pensaba que ese gobierno mundial llegará así tuviera que ser por causa de una nueva guerra donde la potencia vencedora sería la que lo instituyera con base en su poderío militar, sin embargo, creía posible que pudiera lograrse a través de acuerdos y del poder de la persuasión, para lo cual, no bastaría apelar a la razón, sino a leyes y a la fuerza que genera una religión. Einstein pensaba que el pensamiento racional no bastaba para resolver las cuestiones de la vida social y que era necesario que la iglesia y la escuela acrecentaran el poder de la emoción, elemento básico del sentimiento religioso.[56]
En 1952, Einstein dijo que lo que una persona piensa por su cuenta, pero, sin el estímulo de los pensamientos y las experiencias de los otros, es bastante mezquino y monótono.[57] De acuerdo con lo anterior, Gramsci proponía que, en el proceso educativo, deben existir discusiones y que no sea tarea solamente de los intelectuales, sino también entre aquellos que no han adquirido todavía del hábito profesional y la disciplina intelectual requerida para la rápida conexión de conceptos aparentemente dispares y el descubrimiento de las diferencias entre conceptos aparentemente similares, crear un terreno cultural común, un lenguaje común, modos de razonamientos comunes para generar la reciprocidad y esto es posible mediante discusiones orales, por tanto, debe existir equilibrio entre el trabajo escrito y con lo escrito y el trabajo oral recíproco.[58] La escuela, por tanto, debe cumplir que los estudiantes apropien el conocimiento a través de la reflexión compartida de su trabajo con los demás y no solamente de la reflexión que el maestro intente transmitirle.
Algunos autores coinciden que es muy difícil saberlo todo. Crosby decía que es normal que solamente se comprenda una pequeña parte del cuadro general y quien cree saberlo todo tiene, en sí mismo, el mejor método para ir directo al fracaso.[59] Él pensaba que lo importante para el éxito son las relaciones personales, el trato hacia los demás, la prevención, la planeación, la administración y la dirección del cambio de forma continua con una buena organización de los procesos con metas y objetivos claros; que las personas se acostumbren al cambio continuo conforme con las necesidades actuales para que no hagan las cosas a propósito, sino por una reacción ante algún acontecimiento, donde todos participen, porque la mejor forma de comprender algo consiste en participar en su desarrollo e implantación, porque la calidad debe provocarse, no controlarse y significa el cumplimiento de los requisitos.[60] Para Rousseau, la inteligencia humana tiene límites y un hombre no puede saberlo todo y ni siquiera puede saber lo poco que saben los demás por lo que hay que seleccionar las cosas que son importantes para enseñarse, eliminando los conocimientos falsos e inútiles y aquellos que sólo causen orgullo en quien los posee y dar importancia a aquellos que contribuyen a nuestro bienestar pues no se trata de saberlo todo, sino, solamente lo útil.[61]
De acuerdo con lo anteriormente expuesto, la Ciencia puede ayudar a que se manifiesten diferentes tipos de pensamiento (lógico, analítico, creativo, reflexivo, crítico, entre otros) y la emoción generada por la religión o espiritualidad, puede ayudar a establecer el fin que se le dará a este pensamiento para el beneficio común. Por tanto, hoy en día, se le da tanta importancia a la educación de las habilidades socioemocionales dentro del currículo, aunque no se aclara que no se trata solamente que los estudiantes convivan y cooperen momentáneamente, durante su vida escolar, ni se menciona que el propósito no es obligar a los estudiantes a ello para obtener una mejor calificación o porque sea un requisito burocrático, sino, que el fin último es buscar el bienestar común en la sociedad y que, por tanto, estas habilidades ayudarán a concebir que el éxito de cada uno llegará al obtener el éxito de todos, en todas partes, durante toda la vida.
En México, en el Nuevo Modelo Educativo 2017, se dice que la educación además de ser laica y gratuita, debe ser de calidad e incluyente, incluyendo el aseguramiento del acceso a la educación para todos sin importar la situación y el contexto y la calidad como el facilitar aprendizajes y conocimientos significativos, relevantes y útiles para la vida, mencionando como propósito que se debe contribuir a formar ciudadanos libres que sean responsables e informados; capaces de ejercer y defender sus derechos; que participen activamente en la vida social, económica y política; que se desarrollen de forma personal, laboral y familiar; que estén dispuestos a mejorar su entorno social y natural y continuar aprendiendo a lo largo de la vida. La principal meta planteada es que los estudiantes reciban educación integral que los prepare para vivir plenamente en la sociedad del Siglo XXI. Se puede considerar que vivir plenamente se logrará cuando todos busquen la felicidad y el bienestar común. En Educación Media Superior, en la escuela además de las competencias genéricas del Marco Curricular Común, deberá promoverse el desarrollo de las 18 habilidades socioemocionales específicas dentro del programa ConstruyeT que se dividen en 3 dimensiones:
- ConoceT que es la dimensión que tiene que ver con la autoconciencia, la autorregulación de las emociones y las conductas y la determinación para alcanzar sus metas y propósitos a través de la autopercepción, la autoeficacia, el reconocimiento y manejo de emociones, la postergación de la gratificación, la tolerancia a la frustración, la motivación de logro, la perseverancia y el manejo del estrés.
- RelacionaT es la dimensión que permite relacionarse mejor, tener conciencia social y el deseo de una sana convivencia con los demás a través de la empatía, la escucha activa, la toma de perspectiva, la asertividad, el manejo de conflictos entre los individuos tomando en cuenta sus intereses, necesidades y estados de ánimo y el comportamiento prosocial que es la habilidad más importante que significa que todas las acciones se realicen pensando en que contribuyan al bienestar común, independientemente del beneficio propio.
- EligeT es la dimensión que servirá para tomar mejores decisiones de manera reflexiva y responsable a través de la generación y elección de opciones, el desarrollo del pensamiento crítico y el análisis de consecuencias de manera crítica de nuestras decisiones.
Estas habilidades deben ayudar a los estudiantes para ser felices, tener determinación, ser perseverantes y resilientes o, sea, que puedan adaptarse a situaciones adversas y que sean creativos para buscar una mejora continua y, así, fortalecer el proceso de enseñanza-aprendizaje, la identidad y el autoestima, mejorar el desempeño académico y favorecer la existencia de ambientes de sana convivencia en la escuela que ayuden a disminuir en los jóvenes la propensión a desarrollar conductas de riesgo, aunque, negativamente, se menciona que estas habilidades se integrarán porque son altamente demandadas por el sector productivo[62] y no se menciona la importancia de generar un mejor ambiente fuera de la escuela de manera permanente. Al decir negativamente, me refiero que, para lograr un cambio, se debe concebir el cambio, dialogar y actuar para hacerlo posible y la pura implementación de habilidades socioemocionales por la voluntad del sector productivo, no logrará que los maestros y mucho menos los estudiantes, entiendan la importancia de estas habilidades para contribuir a que las relaciones humanas se fortalezcan y que ésta cohesión social se manifieste en una mejora del entorno social y natural, de cada uno de nosotros y donde todos buscan únicamente su bienestar propio a uno donde todos entienden que el bienestar propio llega cuando existe el bienestar de los demás y de la naturaleza, porque solamente cuando la sociedad se entienda como un mismo individuo que vive en un determinado lugar, durante un tiempo y un espacio, se logrará que todos busquen el bienestar de los demás, al igual que el propio y se podrá mejorar la convivencia y, por tanto, renovar la sociedad actual y lograr la igualdad, la justicia y la paz. Además, el Programa Nacional de Convivencia Escolar propone:
- El desarrollo de habilidades sociales y emocionales.
- La expresión y manejo de las emociones de manera respetuosa.
- La resolución de conflictos mediante el diálogo y la búsqueda de acuerdos.
- El respeto y la internalización de las reglas.
- La comunicación y colaboración en el ambiente familiar.
Este nuevo Modelo Educativo manifiesta que vigilará que sean llevados a cabo los ideales de la Revolución y los valores del humanismo. Si se analiza esto, se deberá concebir que, entonces, la educación en México, al igual que en cualquier país, debe darle mayor importancia a generar buenas personalidades y no buenos intelectos. El intelecto debe ayudar a imaginar más caminos posibles para lograr resolver problemas, pero sólo una buena personalidad logrará que se lleven a cabo los ideales de libertad, seguridad y protección, beneficio y bienestar común del pueblo, igualdad, fraternidad, honestidad, justicia y soberanía dentro de un estado de derecho.
De acuerdo con lo anterior, podemos decir, que el programa ConstruyeT tiene relación con lo propuesto por Aristóteles quien pensaba que una persona debe concebir el ser que es la conciencia que tiene y tener conciencia también que el amigo es y esto puede producirse en la convivencia y en el intercambio de palabras y pensamientos.[63] También es similar a la educación práctica (formación escolástica que se refiere a la habilidad y la instrucción que le sirva para alcanzar sus fines y valer más como individuo y es didáctica, formación pragmática que se refiere a la prudencia que lo forma como ciudadano y le hace adquirir un valor público y puede dirigir a la sociedad o adaptarse a ella y formación moral que le hace adquirir un valor en relación con toda la humanidad) propuesta por Kant mediante la cual el hombre forma su personalidad para poder vivir, como un ser autosuficiente que obra libremente como miembro de la sociedad, pero que puede tener por sí mismo un valor intrínseco. Kant pensaba que hay algo en el alma que nos obliga a interesarnos por nosotros mismos, por aquellos entre quienes hemos crecido y por el bien del mundo y que estos intereses debe familiarizarse a los niños y templar en ellos sus almas para que puedan alegrarse por el bien general, aún, cuando no sea el provecho de su patria ni el suyo propio.[64] Rousseau pensaba que las tres misiones de los padres deben ser alimentar a los hijos y educarlos como miembros de una especie, educarlos como hombres sociables y educarlos como buenos ciudadanos del Estado.[65] De acuerdo con Dewey, una sociedad no se refiere a un grupo de personas que viven en una proximidad física, sino que es aquella donde todos reconocen y se interesan por un fin común y, por tanto, regulan sus actividades para conseguirlo y, así, constituyen una comunidad. Dewey pensaba que para eso es necesaria la comunicación y la convivencia, porque el proceso de convivir educa y entonces el objetivo de la escuela debe ser brindarle al estudiante una capacitación para compartir una vida en común y su valor como el de cualquier institución debe recaer en su efecto humano. Él denominaba grupos salvajes a quienes conciben que los niños deben aprender las costumbres, emociones e ideas de los adultos y a quienes les parece absurdo un lugar donde se aprendiera con el fin de poder aprender.[66]
Para Einstein, la existencia y la validez de los derechos humanos, no están escritos en las estrellas porque los ideales sobre la conducta mutua de los seres humanos y la organización más acorde de la comunidad, fueron concebidos y enseñados por seres humanos ilustres. Algunos derechos que mencionaba son:
- Protección del individuo contra la usurpación arbitraria de sus derechos por parte de otros o por el gobierno.
- Derecho a trabajar y percibir ingresos justos por su labor.
- Libertad de enseñanza y discusión.
- Participación del individuo en la formación de su gobierno.
- Derecho y deber de no cooperar en actividades que considere erróneas o dañinas.[67]
Es requisito indispensable que, en las aulas, se enseñe la tolerancia porque las leyes solas no aseguran la libertad si no existe el espíritu de la tolerancia en la sociedad.[68]
De igual manera, es necesario que la escuela cuente con el apoyo de todos los participantes del proceso educativo y del gobierno para permitir asegurar la inclusión y un nivel de vida sin carencias y la ayuda de quienes deforman la ideología de los estudiantes para mal como la televisión. Einstein pensaba que los bienes destinados a sustentar la vida, la salud y la satisfacción de las necesidades físicas, son la condición previa para una existencia decorosa y para desarrollar la capacidad intelectual y artística. Decía que para lograr el desarrollo espiritual y el conocimiento y, así, lograr la mejora de la vida del hombre en todos sus aspectos, se requiere que el individuo tenga libertad interior y libertad exterior. La libertad exterior significa no estar obligado a trabajar tanto para cubrir las necesidades vitales y tener tiempo para actividades personales. La libertad interior consiste en tener pensamiento independiente de las limitaciones y prejuicios autoritarios y sociales, de la rutina antifilosófica y el hábito embrutecedor del ambiente. De acuerdo con Einstein, la escuela y los sistemas de enseñanza obstaculizan el desarrollo del conocimiento cuando ejercen influencias autoritarias y lo favorecen cuando fomentan el pensamiento independiente y dejando que a los estudiantes les quede tiempo para sus actividades personales.[69]
Actualmente, vivimos en una sociedad que se expresa a sí misma como libre, sin embargo, muy pocas personas son libres exteriormente o interiormente. De acuerdo con lo anterior, Aristóteles decía que, para ser virtuoso, son necesarios los bienes exteriores como ciertos instrumentos, tener amigos, contar con riquezas o tener poder político e, inclusive, pensaba que era importante la nobleza de linaje, tener buenos hijos o tener belleza, pues es imposible o no es fácil hacer el bien cuando se está desprovisto de recursos y la falta de algunas cosas empaña la ventura, aunque es posible, con recursos moderados, practicar la virtud.[70]
De acuerdo con Tomas Moro, para los sabios es inútil corregir a los demás, quienes buscarían primero corromperlos a ellos. Platón decía: imagina que ves a la gente caminando por la calle bajo una lluvia incesante e intentas convencerles que se metan a su casa y se aparten del agua, entonces, sales a la calle y no consigues nada, sólo mojarte también. Por tanto, muchos no optan por poner remedio a la necedad de los otros, sino, por quedarse a cubierto, defendiendo, al menos, su seguridad.[71] Einstein pensaba que pocos opinan diferente de los prejuicios de su contorno social y muchos no se atreven ni a imaginar diferente, pues para ser miembro perfecto de un rebaño de ovejas, se debe ser una oveja.[72] En complemento de lo anterior, Einstein pensó que, anteriormente, la educación tenía la única función de abrir el camino al pensar y al conocer, la escuela debía servir como instrumento para la instrucción del pueblo[73] y, en 1934, en su artículo Educación y paz mundial[74] propuso:
- Educar a la juventud de manera realista para el establecimiento de la paz y no desde un punto de vista emotivo.
- No permitir que los jóvenes crean que la seguridad se puede obtener a través del aislamiento político.
- La Historia debe inculcar el progreso de la civilización y no los ideales burgueses y de conquista militar.
- En geografía e Historia se debe inculcar el entendimiento fraterno de los diversos pueblos, incluso aquellos llamados primitivos o atrasados (aprender a convivir).
- Einstein recomendó el libro Breve Historia del mundo de H. G. Wells, el cual, junto a los libros Utopía de Tomás Moro, La República de Jauja de Juan Rafael Allende, Ami el niño de las estrellas de Enrique Barrios y Robinson Crusoe de Daniel Defoe, constituyen libros que todo estudiante debería conocer.
- Posteriormente, en su discurso de 1936, Sobre educación[75] dijo:
- Los actos cívicos deben estimular al bien dispuesto de hoy a un esfuerzo valiente. Esta propuesta tiene una gran relevancia pues significa que el maestro, mediante la enseñanza del reconocimiento de la labor realizada por hombres ilustres en el pasado, puede generar que el estudiante adopte el ejemplo y se motive a cambiar el presente con visión de un futuro mejor.
- El conocimiento debe renovarse continuamente por un esfuerzo incesante para que no se pierda. Este razonamiento de Einstein es relevante porque significa que solamente el conocimiento que se renueva es racional y lo demás se realiza por simple costumbre o moda instruida, lo cual no necesita del uso de la razón y genera personas acríticas que no reflexionan. Esta es la principal función que debería tener la educación en el mundo: hacer reflexionar a los estudiantes el pasado y el presente para lograr un futuro mejor, de esta manera, la educación servirá para que las personas entiendan que todo se puede renovar según convenga a las necesidades humanas y que esto se logrará cuando se sumen las voluntades individuales para generar la voluntad general de la sociedad y, así, ya no se formarán a los estudiantes para ser parte de la sociedad actual del Siglo XXI, sino, para construir una sociedad mejor en el futuro.
- La escuela ha sido el medio más importante de transferir la riqueza de la tradición de una generación a la siguiente.
- Para Einstein, la continuidad y la salud de la sociedad humana dependen, en mayor grado, de la escuela. Kant había pensado que los padres se preocupan por el cuidado de la casa y los príncipes del Estado en el presente y, por tanto, ni unos ni otros se ponen como fin un mundo mejor y, por tanto, el principio de mayor importancia para la educación es que no se debe educar a los niños conforme con el presente, sino conforme con un estado mejor, posible en lo futuro de la especie humana, es decir, conforme con la idea de humanidad y de su completo destino.[76]
- La escuela no sólo debe transferir conocimientos porque el conocimiento está muerto y ésta debe servir a los vivos. En 1949, dijo que el conocimiento existe en dos formas: inerte y sin vida en los libros y vivo en la conciencia de los seres humanos y la segunda forma es la fundamental.[77] Rousseau mencionaba que lo importante era apropiar el conocimiento en el hombre pues pensaba que los libros sólo enseñaban a hablar de lo que uno no sabía.[78]
- Einstein pensaba que deben formarse en el estudiante cualidades y capacidades valiosas para el bienestar del Estado, lo cual, no significa destruir la individualidad para que se convierta en una simple herramienta de la comunidad como una abeja o una hormiga porque una comunidad de individuos estandarizados, sin originalidad personal ni objetivos propios, sería una sociedad empobrecida sin posibilidades de desarrollo, al contrario, deben formarse individuos que actúen y piensen de manera independiente y que consideren su interés más importante, el servicio a la comunidad. Este pensamiento de Einstein tiene relación con Platón, quien de acuerdo con John Dewey, pensaba que una sociedad necesita para funcionar adecuadamente que cada uno de sus miembros trabaje en aquello para lo cual tiene por naturaleza aptitud, para poder ser útil a los demás, por tanto, la función de la educación debe ser descubrir estas aptitudes y adiestrarlas progresivamente para el uso social.[79]
- De acuerdo con el punto anterior, Rousseau resaltaba la importancia de enseñar a las personas a apreciar las cosas y a las personas y su trabajo, por la utilidad que tienen para la seguridad, la conservación y el bienestar y no darle importancia, como se hacía entonces y como se hace ahora, a las cosas inútiles y sin sentido y a los trabajos que no aportan algo bueno a la sociedad. Un ejemplo claro son las joyas cuyo valor no consiste en la utilidad que se le puede dar, porque solo son adornos vanos del cuerpo, de igual manera los trabajos dirigidos al ocio son los mejores pagados, como los actores, cantantes o futbolistas. Rousseau pensaba que se desean este tipo de cosas y se les da un valor muy alto a estos trabajos, porque no pueden pagarlo los pobres, es decir, no se desea tener algo por su utilidad, sino aquello que la mayoría de la gente no puede tener Nolo habere bona, nisi quibus populus inviderit.[80] Para Rousseau era muy importante enseñar al individuo a través de la realidad misma y a vivir con la menor ayuda de aparatos u objetos que distorsionan la realidad, como un mapa, el cual, no es lo mismo revisar uno que ha sido hecho a realizar uno por cuenta propia. Kant también pensaba que la parte positiva de la educación es la cultura que se forma ejercitando las facultades del espíritu, lo cual se logra apartando al estudiante de los instrumentos que destruyen su habilidad natural.[81]
- De acuerdo con Einstein, la personalidad no se forma por lo que se oye y se dice, sino por el trabajo y la actividad, por tanto, pensaba que el mejor método de educación ha consistido en hacer que el estudiante sea instado a la actuación real, como ejemplo de ello, se encuentran los primeros intentos de escribir de los niños o cuando escribimos una tesis doctoral, memorizamos un poema, escribimos, interpretamos o traducimos un texto, resolvemos un problema matemático o cuando practicamos un deporte (aprender a aprender). Sobre esto, Rousseau decía que es necesario que el estudiante no vea una operación sin que él intervenga, ni que salga de un taller sin saber a fondo la razón de lo que se hace en él o de lo que haya observado y el maestro debe trabajar también como ejemplo porque para que el estudiante se haga maestro, el maestro debe hacerse aprendiz y el estudiante aprenderá más en una hora de trabajo que con un día de explicaciones.[82] Rousseau pensaba igual que Einstein que las lecciones en la escuela deben estar fundamentadas más en las acciones que en los discursos porque los niños se olvidan fácilmente de lo que dicen y escuchan, pero recuerdan perfectamente lo que han realizado y les ha sucedido.[83] Kant llegó aún más al fondo de este asunto cuando menciona la máxima: sólo sabemos lo que tenemos en la memoria tantus scimus, quantum memoria tenemus, manifestando que la memoria es muy necesaria, pero no sirve de nada cuando no va acompañada de la reflexión, por ejemplo, cuando aprendemos algo de memoria, pero no tiene ningún significado para nosotros, cuando sólo se aprenden para un futuro examen como mero deletreo y, por tanto, se olvidará con facilidad futuran oblivionen y pensaba que el mejor recurso para comprender es producir algo porque lo que se aprende por sí mismo es lo que se aprende más sólidamente y es lo que mejor se conserva.[84] Asimismo, hablando de personalidad, Dewey pensaba que las creencias, las aspiraciones y las actitudes, no pueden ser incrustadas ni moldeadas materialmente en una persona y, por tanto, es necesaria la acción del ambiente para generar una forma de ver, de sentir y de actuar. Dewey pensaba que un ambiente no es simplemente el lugar o el contexto social donde se vive, sino que pueden ser cosas o personas que se encuentren lejanas en el espacio o el tiempo pero que hacen variar a un hombre, aquellas condiciones que promueven, dificultan, estimulan o inhiben la actividad de un ser vivo. Denominaba ambiente social aquel que ejerce una influencia educativa o formativa de manera inconsciente y aparte de todo propósito establecido. Por tanto, pensaba que el adiestramiento se refiere al condicionamiento de los estímulos naturales que modifican los hábitos externos, lo que se genera por la presión externa del ambiente, de las expectativas, exigencias, aprobaciones y condena de los demás. Dewey pensaba que el adiestramiento no genera interés en la realización de una actividad y que para que exista el deseo y se adquiera un sentido, debe tenerse una experiencia compartida por la imaginación (lo cual a veces no permite obtener el mismo sentido de las palabras) o por el trabajo realizado en una acción conjunta, de no ser así, los estímulos serán puramente físicos y no tendrán sentido ni valor intelectual.[85]
- Debe haber motivación en el estudiante para la realización de un trabajo, pero debe cuidarse que su origen no sea el temor y la compulsión, el deseo ambicioso de autoridad y distinción, el miedo al castigo o la pasión egoísta, sino, que sea el interés de obtener la verdad y comprender, el deseo de placer y la satisfacción del trabajo, para que la curiosidad divina que todo niño sano posee no se debilite (aprender a hacer) porque la voluntad gobernada por una firme convicción es más fuerte que el poder material.[86] Este pensamiento de Einstein es similar al pensamiento de Aristóteles para quien, “…sin actividad no hay placer y el placer perfecciona toda actividad.”[87] De igual manera Rousseau pensaba que la pasión nos induce a obrar y los cerebros bien dispuestos logran conocimientos duraderos.[88] Según Dewey, al participar en una actividad, “…el individuo se apropia el propósito que la motiva, se familiariza con sus métodos y materias, adquiere la destreza necesaria y se satura de su espíritu emocional.”[89]
- La administración de la escuela y la actitud de los profesores influyen en la formación de la psicología de los estudiantes. Por tanto, la educación que tenga el director de plantel y los maestros, será la educación que fomenten en los estudiantes, sea esta buena o mala.
- Para Einstein, lo peor de la escuela es que usa el temor, la fuerza y la autoridad, destruyendo los sentimientos sanos, la sinceridad y la autoconfianza de los estudiantes porque genera personas sumisas, por tanto, pensaba que el poder del maestro debe tener su base en medidas coactivas, donde la única fuente de respeto sean sus propias cualidades humanas e intelectuales. Para Rousseau, los hábitos adquiridos a la fuerza, como son en contra de la voluntad, son abandonados, por tanto, pensaba que la fuerza es una potencia física de la cual no puede resultar ninguna moralidad porque ceder a la fuerza se hace por necesidad y no por voluntad y, entonces, la fuerza no constituye derecho.[90] Kant, por el contrario, dijo que la obediencia absoluta surge de la coacción y la obediencia razonada surge de la confianza; la segunda es la más importante, pero la primera es necesaria porque prepara al niño para cumplir las leyes que, después, tendrá que cumplir como ciudadano, aunque no le agraden.[91] Por tanto, la opinión de Einstein era una posición intermedia ya que no significaba que no deban existir reglas o normas que seguir. Sobre esto, y tomando en consideración a Gramsci, podemos afirmar que esas reglas o normas son correctas y necesarias siempre y cuando sean realizadas en conjunto entre directivos, maestros y estudiantes para que exista el interés y la comprensión de porqué deben adoptarse dentro y fuera de la escuela, puesto que la disciplina no es mala porque no anula la personalidad y la libertad, quien lo hace es el origen del poder que ordena tal o cual disciplina y, si este origen es democrático y no solamente una imposición extrínseca y exterior, la disciplina se convierte en un elemento necesario de orden democrático de libertad, pero cuando la disciplina se ejerce por fuerza no será por voluntad de quien recibe la orden y, por tanto, sus resultados serán negativos.[92]
- Según Einstein, el deseo de aprobación y reconocimiento es sano, pero el deseo de ser reconocido como el mejor, el más fuerte o el más inteligente genera un ajuste psicológico excesivamente egoísta que puede llegar a ser perjudicial para el individuo y para la comunidad, por tanto, la escuela y el maestro deben evitar crear la ambición individual con la intención de inducir a los estudiantes a un trabajo diligente. Kant opinó que el niño debe cumplir deberes consigo y con los demás y deberá estimarse en absoluto, es decir, no estimarse por el valor de los otros sino por los conceptos de su razón porque cuando el hombre se valora por los otros, intentará elevarse sobre los demás o de disminuir el valor de ellos, además pensaba que debe incitarse que no se esfuercen en parecer mejores, sino en ser mejores.[93] De acuerdo con lo anterior, es preferible una mejora lenta y colectiva que una rápida e individual, por tanto, el sistema educativo sistematizado por edades y calificaciones, inculca en los estudiantes una conducta negativa contra el socialismo.
- Einstein pensaba que la teoría de Darwin sobre la lucha por la existencia y la selectividad relacionada con ella, ha sido citada por muchas personas como una autorización para fomentar el espíritu de competencia por lo que algunas personas han tratado de demostrar pseudocientíficamente la necesidad de la destructiva lucha económica de la competencia entre los individuos. Pensaba que esto es un error, porque el hombre debe su fuerza en la lucha por la existencia al hecho que es un animal socialmente vivo y, de igual manera, como una batalla entre hormigas ataca su supervivencia, sucede con los miembros individuales de una comunidad humana. Por tanto, uno debe evitar la predicación al éxito en el sentido acostumbrado actualmente, donde se piensa que el éxito lo obtiene quien recibe mucho de sus semejantes porque el valor de un hombre, debe verse en lo que da y no en lo que puede recibir.[94] De acuerdo con este punto, Aristóteles pensaba que la justicia es la virtud más perfecta porque el que la posee puede usarla para con otro y no sólo en sí mismo y el peor hombre es el que usa la maldad inclusive consigo mismo y con los demás y el mejor hombre no es el que usa la virtud para consigo mismo, sino para con otro, porque esto es lo más difícil de hacer.[95] Por tanto, podemos concebir que la educación debe formar ciudadanos capaces de tener obligaciones y deberes más que sus propensiones y deseos.
- El motivo más importante para trabajar en la escuela y en la vida, es el placer del trabajo, de su resultado y el conocimiento del valor que tiene el resultado de este trabajo para la comunidad (aprender a servir). Según Einstein, este fundamento psicológico genera el deseo de obtener la posesión más valiosa en un individuo: el conocimiento y la destreza artística.[96] Sobre esto, Aristóteles mencionaba que hay tres cosas en el alma que rigen la acción y la verdad: la sensación, el entendimiento y el deseo. La primera no genera acción alguna. El principio de la acción es la elección y el de la elección el deseo orientado a un fin junto con el entendimiento, la reflexión y la disposición moral. Para que exista la elección, el razonamiento tiene que ser verdadero y el deseo recto y tiene que ser lo mismo lo que la razón diga y lo que el deseo persiga. La reflexión (teoría), por sí misma, no pone nada en movimiento, sino, la reflexión orientada a un fin y a una práctica. Cuando alguien hace una actividad con vistas a lograr algo, dicha actividad no es fin absolutamente hablando, sino lo que logramos con dicha actividad, porque el hacer bien las cosas es lo que es fin y eso es el objeto del deseo. Por tanto, la elección, es inteligencia deseosa o deseo inteligente y esta clase de principio es el hombre. También pensaba que no se delibera sobre lo pasado, sino, sobre lo futuro y lo posible y lo pasado no puede no haber ocurrido y la operación de las dos partes intelectivas (teoría y práctica orientada a lograr un fin) es, por consiguiente, la verdad, que está de acuerdo con el deseo recto.[97] De igual manera, Kant pensaba que la educación escolar consiste en el trabajo del niño y la educación libre en el juego, cuando existe un mayor descanso es más fácil que el niño se decida a trabajar y el trabajo es agradable cuando se emprende con un propósito.[98] Este pensamiento de Einstein, es demasiado similar al pensamiento del estadounidense John Dewey, pues éste pensaba que en la noción ordinaria de la educación, se ignoraba la necesidad social que ésta tiene y solamente se le limitaba a ser un medio para proporcionar información y transmitir saberes. Dewey pensaba que era muy importante la actividad real, directa o indirectamente en el juego, que hubiera comunicación para que la experiencia se convirtiera en una posesión común y que la adquisición de información y de destreza intelectual técnica generara una disposición social, es decir, que lo aprendido en la escuela, se utilizara en beneficio de la sociedad para que el conocimiento adquiriera sentido y no se crearan especialistas egoístas.[99] De acuerdo con John Dewey lo moral tiene que ver con lo racional. Para Dewey la educación moral en la escuela es difícil porque la formación del carácter se nulifica al ocupar la mayor parte del tiempo escolar en intentar facilitar el conocimiento y el desarrollo de la inteligencia. Dewey pensaba que el conocimiento que se adquiere por la experiencia es el que afecta la conducta del individuo, por tanto, no se debería permitir que un estudiante aprenda cosas solamente para repetir cuando se le pregunte porque solamente tendrá un efecto negativo en su conducta, formando un ser que repite afirmaciones a petición de los demás y, por tanto, ese conocimiento no tendrá influencia fuera de la escuela sino es mediante la conexión entre el conocimiento y la actividad, es decir, que lo que se ha aprendido, se emplee en una ocupación con un fin y mediante la cooperación con otros, lo que genera un conocimiento moral porque no solamente obtiene un valor técnico, sino que construye un interés social. Dewey pensaba que la virtud no es cultivar rasgos determinados exclusivos, sino que significa ser plena y adecuadamente en la asociación con los demás en todas las funciones de la vida. Para Dewey, el peligro de la escuela está en la ausencia de condiciones que hagan posible desarrollar un espíritu social penetrante. Por tanto, la escuela tiene que ser una comunidad de vida y no debe apartarse como un lugar que únicamente sirve para aprender lecciones y, entonces, el aprender en la escuela debe mezclarse con el de fuera de ella para generar un espíritu que se preocupe por mejorar su realidad y no un espíritu social reminiscente que valora más la vida de otros tiempos que el propio. La escuela debe desarrollar los rasgos morales de disciplina, de cultura y de eficiencia social porque no basta que el hombre sea bueno sino que tiene que tener la capacidad para vivir como un miembro social que no solo reciba de los demás sino que también contribuya. Para Dewey, el problema de la relación del conocimiento y de la conducta, se supera cuando el aprender se basa en actividades u ocupaciones con una finalidad social, porque la escuela se convierte en una comunidad en miniatura y en íntima interacción con otros modos de experiencia asociada más allá de los muros de la escuela. Toda educación que desarrolla la capacidad de participar en la vida social es moral y, ésta, genera un interés por aprender.[100] En la actualidad, también, existen autores que hablan acerca de la importancia de que la educación debe contribuir a la mejora de la sociedad mediante la aplicación real del conocimiento y esto, al mismo tiempo, mejorará el proceso educativo al darle sentido a los aprendizajes. Tedesco, Opperti y Amadio, mencionan que la educación puede reformar la sociedad implantándole valores a los estudiantes, acercándolos a la justicia social y este debe ser el motivo y la función de para qué educar. Mencionan que los sistemas educativos exitosos son aquellos que propician el desarrollo de competencias para la vida y para el ejercicio de la ciudadanía, es decir, para vivir bien en lo individual y en lo social. Argumentan que para lograrlo es necesario una alta calidad en los conocimientos compartidos por los docentes con los estudiantes, la aplicación del conocimiento en problemas de la vida real y el énfasis en valores y actitudes como el aprecio por la libertad, la solidaridad, la paz y la justicia y, por tanto, una competencia la definen como “una combinación de conocimientos, capacidades y actitudes adecuadas al contexto” o sea que puedan encarar desafíos y situaciones de la vida diaria y definen competencias clave como “…aquéllas que todas las personas precisan para su realización y desarrollo personales, así como para la ciudadanía activa, la inclusión social y el empleo.” Asimismo, dicen que la inteligencia emocional, o bien, la unión entre lo cognitivo, lo ético, lo social y lo emocional, debe propiciar la adhesión de la sociedad con la justicia social, cumpliendo con el objetivo de aprender a vivir juntos. Explican que sobre esto la neurociencia ha demostrado que en la actividad del cerebro, trabajan juntas una parte denominada cognitiva y motora y otra denominada cerebro emocional, por tanto, para aprender, es necesario dejar de separar los procesos cognitivos (la razón) de las emociones (las pasiones) y entender sus interrelaciones, es decir, la naturaleza emocional de los procesos cognitivos y la naturaleza cognitiva de las emociones, combinando el desarrollo cognitivo con la dimensión emotiva para evitar que la educación sea pura instrucción. De acuerdo con estos autores, la sinergia entre los aspectos cognitivos, emocionales y sociales, pueden lograr que los aprendizajes sean relevantes y sustentables en el estudiante y, como ejemplo, mencionan que en el proceso educativo de Finlandia, se incluye en el currículo que el principal objetivo de todos los que trabajan en la comunidad educativa, sea el bienestar del estudiante.[101]
- De acuerdo con Einstein, debe estimularse la inclinación de los niños por el juego y el deseo infantil de reconocimiento y guiar al niño hacia dominios que sean beneficiosos para la sociedad. La educación, en su mayoría, debería tener su base en el deseo de una actividad y un reconocimiento por ella porque la escuela con tales enfoques se verá honrada con la nueva generación y las tareas serán aceptadas como un don especial. Einstein dijo conocer niños que preferían la escuela a las vacaciones.
- Para Einstein, la selección de las disciplinas que deben enseñarse y el método de enseñanza, son de importancia secundaria e hizo una analogía, manifestando que si un joven ha adiestrado sus músculos y su resistencia física, podrá, más tarde, realizar cualquier tarea ruda y, de igual manera, sucede con el entrenamiento de la mente y el ejercicio de la habilidad mental y manual.
- La educación es eso que permanece si uno ha olvidado todo lo que aprendió en la escuela.
- La escuela debe enseñar de manera directa conocimiento especial y aptitudes que se han de utilizar después en la vida, sin embargo, las exigencias de la vida son demasiado múltiples para que resulte posible esta formación especializada en la escuela. La escuela tiene que tener el objetivo que el joven salga de ella con una personalidad armónica y no como un especialista que es aplicable solamente a las escuelas técnicas. Las demás escuelas deben desarrollar la capacidad de pensamiento y juicio independientes y no la adquisición de conocimientos especializados. Si el estudiante aprende los fundamentos de su disciplina y a pensar con autonomía, será mucho más hábil para adaptarse al progreso y los cambios que aquel cuya formación consista solamente en la adquisición de algunos conocimientos detallados.
Para Einstein una escuela de este tipo exige que el maestro sea una especie de artista en su actividad, por tanto, proponía las siguientes condiciones que deberían existir:
- En primer término, los maestros deberían crecer en esas escuelas. Se entiende esto como la formación docente y la libertad y felicidad alcanzada por su labor.
- En segundo lugar, conceder amplia libertad al profesor para seleccionar el material de enseñanza y los métodos pedagógicos que desee emplear.
- En tercer lugar, algo que me llama la atención de alguien que vivió varias etapas difíciles, es que pensaba que el placer de la organización del propio trabajo no debe verse sofocado por la fuerza y por presiones externas.
- En 1945 escribió que los profesores deberían tener menos obligaciones docentes para poder dedicar más tiempo a la investigación.[102]
Einstein escribió en el New York Times, en 1952, un artículo titulado Educación para el pensamiento independiente[103] y, en él, dijo:
- Enseñar al estudiante una especialidad sería hacer una especie de máquina, pero no un desarrollo armonioso de la personalidad.
- El estudiante debe adquirir una comprensión de los valores y una profunda forma de vivir con ellos, debe adquirir un vigoroso sentimiento de lo bello y de lo moralmente bueno, comprender las motivaciones de los seres humanos, sus sufrimientos e ilusiones para adquirir una relación adecuada con su prójimo y la comunidad (aprender a ser).
- Eso se transmite con el contacto personal con quienes enseñan y no, o al menos no en lo principal, a través de los libros de texto.
- Las humanidades y el conocimiento especializado en los campos de la Historia y la Filosofía son muy importantes.
- La insistencia exagerada en el sistema competitivo y la especialización prematura fundada en la utilización inmediata, matan el espíritu y por tanto, el conocimiento. Recordemos que Rousseau planteaba dejar al niño ser niño, enseñarle racionamientos hasta después de los doce años y la utilidad en la educación no al ganar tiempo, sino al perderlo.[104]
- Es vital para la educación, desarrollar en el estudiante la capacidad de pensamiento crítico independiente, lo cual es perjudicado por sobrecargar al estudiante con demasiados temas tan variados. Aristóteles también había dicho que el placer producido por una actividad es un obstáculo para prestar atención y aprender otra.[105] Gramsci pensaba que la actividad crítica se había reducido simplemente a revelar trucos, suscitar escándalos y pedir cuentas a los hombres representativos.[106]
- La enseñanza debe ser tal que lo que se ofrece se perciba como un regalo valioso y no como un deber duro.
En 1928 Einstein participó en los cursos universitarios internacionales llevados a cabo en Davos[107] donde manifestó:
- Las comunidades tienden a ser guiadas menos que los individuos por la conciencia y un sentido de responsabilidad. ¡Cuánta miseria hace este hecho al hombre! Es la fuente de las guerras y de toda clase de opresión, que llenan la tierra de dolor, suspiros y amargura.
- Esto es generado por la cooperación desinteresada de muchas personas.
- La interrupción de la formación intelectual en el período formativo de la juventud difícilmente se puede recuperar más tarde.
- El trabajo intelectual con moderación, lejos de retrasar la curación, indirectamente lo ayuda a avanzar, al igual que el trabajo físico moderado.
- La mejor manera de servir a la causa del internacionalismo es cooperando en algún trabajo que da vida.
- En una charla con un grupo de niños, publicada en 1934, dijo:[108]
- Las cosas maravillosas que se aprenden en la escuela son el trabajo de muchas generaciones, producido por el esfuerzo entusiasta y el trabajo infinito en todos los países del mundo.
- Esta herencia es puesta en ustedes para que la honren, la añadan y un día la entreguen fielmente a sus hijos. Así, los mortales alcanzan la inmortalidad en las cosas permanentes que crean en común. Si tienen esto en mente siempre, encontrarán un sentido para la vida y el trabajo y adquirirán una actitud correcta hacia otras naciones y edades.
- En una carta a una niña publicada en 1934 dijo:[109]
- He sufrido a manos de mis maestros porque se disgustaban por mi independencia, me ignoraban y no me tomaban en cuenta cuando necesitaban asistentes, pero uno no debe quejarse de otros que están luchando por su lugar en el Sol, también, a su manera.
- Voy a Princeton a investigar, no a enseñar. Este pensamiento de Einstein es muy importante porque presenta la función del docente como un guía que al mismo tiempo debe ser un aprendiz eterno.
- Según Einstein, la única manera racional de educar es mediante el ejemplo, si un maestro no puede ayudar a ello, es un ejemplo peligroso. De acuerdo con este pensamiento, Gramsci dijo que la educación depende de las creencias e ideologías que tengan los maestros y, en mayor grado, el Director de la escuela porque los directores creen estar en el nivel más alto y ponen como ideal su posición.[110] Por tanto, es importante que el docente y, más aún, quien ocupe el cargo de director de plantel, sean los primeros en cumplir con las normas y obligaciones que establezcan, esto es, educar con el ejemplo, porque como decía Rousseau, se desconfía de quienes dictan obligaciones que no se dignan cumplir en torno de ellos.[111]
De acuerdo con Felipe Trigo, la renovación de la sociedad deberá ser iniciada en las naciones cultas. El socialismo es un sistema político de democracia perfecta en una vida de paz y trabajo, un gobierno de todos para todos. Si se consigue a la fuerza, habrá resistencia y hostilidad por los vencidos que sumado a la ignorancia de la mayoría de los vencedores, corromperá su esencia de fraternidad, constituyendo una dictadura sin eficacia y en desorden. Esto ocurrió en la Comuna de París y seguirá ocurriendo mientras no haya obediencia de cada uno a la voluntad general. Requiere que haya transformaciones previas y posteriores. Se deben transformar previamente las nacionalidades, las aptitudes individuales, la receptividad para las enfermedades, los vicios, el amor y los deseos y posteriormente deberá transformarse la propiedad, la herencia, el trabajo y las jerarquías, la mujer como entidad social y el hogar. Hay caracteres constantes del hombre como su estructura y forma, su pensamiento y su sentimiento y caracteres variables que son modalidades de su estructura y su inteligencia (pensar o sentir de diferente manera) que son creadas por el ambiente social. El medio externo capaz de influenciar la parte moral del hombre es la educación que es el conjunto de impresiones sensitivas que afectan al cerebro. Aunque sujetos a iguales condiciones no son iguales y es imposible reformar a un hombre ya formado por eso es necesario educar a los niños ciertos hábitos porque todo se puede dominar mediante la paciencia, la reflexión y el hábito de estudio. La familia y la sociedad establecen la vocación en el individuo. Debe haber inteligencia en conjunto con la moral porque la pura instrucción solo consigue criminales instruidos sin alterar la cifra de delincuentes y es que la instrucción es un accidente de la educación. Por tanto, se deben modificar las instituciones, las costumbres, los conocimientos y todo lo que influya en la manera de ser de los estudiantes porque en cualquier país una generación bien mantenida física y moralmente puede cambiar la sociedad y si 20 años bastan para convertir a un niño en ingeniero, debe bastar para convertir en buenos ciudadanos a todos los niños de una generación siempre que así lo desee la generación precedente y esas son las ventajas de la educación por las que cada bar se puede convertir en una escuela, porque “…un montón de pólvora puede haber permanecido sin mudanza mucho tiempo y volar en un segundo al contacto de una chispa.” Sin embargo, Trigo pensaba que el cambio social no depende solamente de la voluntad humana o la conciencia, sino de la vida misma, tal como el árbol que muda su cáscara.[112] En complemento de lo anterior, Kant pensaba que un hombre que esté físicamente muy cultivado y tenga el espíritu muy formado, si está moralmente mal educado, será una mala criatura.[113]
Para Gramsci el cambio social debe darse en diversos momentos o grados de la relación entre fuerzas:
1. Primero existe la relación de fuerzas sociales. Aquí cada grupo social tiene una función y una posición dada en la producción.
2. Después se genera la relación de las fuerzas políticas. En esta se evalúa el grado de homogeneidad, de autoconciencia y de organización de los diversos grupos sociales conforme a:
- Momento económico-corporativo. Es cuando un comerciante siente que debe ser solidario con otro comerciante, un fabricante con otro fabricante, etcétera, pero el comerciante no se siente todavía solidario con el fabricante, es decir, existe la unidad homogénea del grupo profesional, pero todavía no del grupo social más vasto.
- Momento de solidaridad de intereses. Es cuando existe la unidad entre todos los grupos sociales, pero solamente en lo económico. En el Estado, se busca alcanzar una igualdad política jurídica con los grupos dominantes. Se reivindica el derecho de participación en la legislación y en la administración y tal vez incluso se modifique o reforme ésta, pero en los cuadros fundamentales existentes.
- Momento de conciencia. Es cuando los intereses superan el círculo corporativo, de grupo meramente económico y pueden y deben convertirse en intereses de otros grupos subordinados. Es la fase política que señala el tránsito de la estructura a la superestructura. Es la fase en la que las ideologías entran en confrontación y se declaran en lucha hasta que una sola de ellas o al menos una sola combinación de ellas, tiende a prevalecer, a imponerse, a difundirse por toda el área social, determinando, además de la unidad de fines económicos y políticos, también la unidad intelectual y moral, situando todas las cuestiones en torno a las cuales hierve la lucha no en el plano corporativo sino en un plano universal, creando así la hegemonía de un grupo social fundamental sobre una serie de grupos subordinados. El Estado es concebido como organismo propio de un grupo, destinado a crear las condiciones favorables para la máxima expansión del grupo mismo, pero este desarrollo y esta expansión son concebidos y presentados como la fuerza motriz de una expansión universal, de un desarrollo de todas las energías nacionales o, sea, que el grupo dominante es coordinado concretamente con los intereses generales de los grupos subordinados y la vida estatal es concebida como un continuo formarse y superarse de equilibrios inestables entre los intereses del grupo fundamental y los de los grupos subordinados.
3. Finalmente se debe incorporar la relación de las fuerzas militares.[114]
Einstein no pensó en un socialismo como dictadura del proletariado, sino que lo concibió como el cambio del Estado mediante principios creados por la cultura de la ética y la moral y una educación socialista con base en las necesidades de la Humanidad y no con base en la competencia como la educación capitalista. La moral puede entenderse como los buenos hábitos y la práctica de las leyes obligatorias según las cuales se debe obrar y la ética como el uso correcto de la razón que genera una fuerza en nosotros para obrar de manera que nuestros actos sean dignos de tomarse como norma, regla o ley.[115] Estos principios deberán accionar a la sociedad mundial para organizarse a sí misma para la utilidad pública y para construir la manera en la que se quiere vivir y, así, eliminar la figura de súbditos y las clases sociales. Es decir, Einstein pensaba en un cambio interior que cambiará lo exterior. Un cambio ético-moral social que deviniera en un cambio político porque no puede haber disputa entre la práctica (política) y su teoría (ética y moral). Un cambio de conciencia social que se apoyara en leyes consensuadas entre los ciudadanos para el beneficio común. Lo pensado por Einstein coincide, de alguna manera, con Kant quien pensaba que la moralidad no produce una buena Constitución, sino ésta es la que puede educar moralmente a un pueblo.[116]
En México en “…1934, se modificó el Artículo 3° constitucional —vigente desde 1917— para establecer el carácter socialista de la educación.”[117] David L. Raby aclara que, en los años treinta, en el periodo de Lázaro Cárdenas, cuando el régimen de la Revolución Mexicana no estaba bien establecido, se intentó una educación socialista, siendo México un país capitalista donde existía el antagonismo entre el Estado y la iglesia. Los problemas que existieron al tratar establecer ese tipo de educación es que no hubo un establecimiento definido de ideales y, además, algunos intelectuales desorientaban la información, logrando que la reforma del Artículo 3° fuera inicialmente aceptada como una medida anticlerical. Sin embargo, para Cárdenas, la lucha contra el fanatismo estaba ligada a la reforma agraria, los derechos sindicales y un programa social progresista y no una simple campaña anti religiosa. Algunos intelectuales, como los callistas, deformaban la ideología en los maestros para sembrar la confusión y dividir el movimiento y si bien no lograron el poder, provocaron problemas para el gobierno cardenista. Menciona que Ignacio García Téllez en 1935 decía que la prensa nacional y extranjera presentaba a la escuela socialista como si no tuviera otra finalidad más que la de estar en contra de la religión confundiendo y molestando a las masas ofuscadas y empobrecidas. También menciona que Luis G. Monzón había propuesto en el Congreso constituyente el término racionalismo en lugar de laicismo para el Artículo tercero, por tanto, la educación en México debería entenderse como gratuita, obligatoria y racional. En 1928, Portes Gil se declaró a favor de la escuela socialista, pero la llamó escuela activa. Esta educación insistía en atender la salud física y mental de los niños, la introducción de nuevos métodos pedagógicos como el trabajo manual y la socialización del sistema educativo con ideas pedagógicas de Froebel, Ferrer Guardia y John Dewey, entre otros. Además, el contexto de miseria en el que se desenvolvían los maestros generaba, en su conciencia, la necesidad de una educación orientada hacia las exigencias de la vida rural. El peor error es que los maestros no tenían la orientación teórica para esas actividades y, así, la escuela activa de Dewey adoptada por Moisés Sáenz, pretendía fortalecer la orientación necesaria en cuestiones de higiene, salud, trabajo y la relación escuela-comunidad, pero esto no era educación socialista, sino, educación capitalista llevada al campo porque, sin una modificación en la estructura de la propiedad no pueden satisfacerse las necesidades de los campesinos y, entonces, la confusión entre socialización y socialismo entre maestros e intelectuales, hacía que se preconizara una educación socialista como aquella activa, orientada hacia la comunidad, la promoción de pequeñas industrias y mejores métodos de cultivo, la organización social y política de los campesinos y su participación en las luchas por la modificación de las relaciones de propiedad y de poder en las zonas rurales, aunque esto no era socialismo sino un capitalismo más desarrollado. Raby escribió que, aún si lo hubieran entendido, era más importante la lucha contra la injusticia, la opresión del campesinado y el atraso del progreso. Entonces, los marxistas encabezados por Alberto Bremauntz, los maristas, el Partido Comunista y los funcionarios de educación estuvieron de acuerdo que prevaleciera el concepto marxista que la educación socialista debía ser de acuerdo con los principios del socialismo científico visualizando que la educación socialista podía servir como instrumento de combate y movilización popular para lograr el socialismo. Aunque esto, como era de esperarse, no fue aceptado ni patrocinado por el Estado burgués y sobre esto Bremauntz manifestó que el presidente Rodríguez se opuso a la reforma del Artículo tercero, confirmando que los hombres que tenían el poder temían por el cambio del régimen capitalista y, por tanto, estuvieron de acuerdo en quitar el poder de la iglesia, pero no en modificar ni en afectar al sistema capitalista ni a las clases explotadoras. Otras citas son la del maestro Emilio R. Vázquez que estaba en desacuerdo con la implementación en la escuela de la enseñanza avícola y pequeñas industrias porque eso no cambiaría la situación, sino, que la educación debía tender a mejorar el momento vivido y la del maestro César Martino quien decía que los maestros deben saber y decir siempre que el pueblo no ha satisfecho sus necesidades, que el problema agrario no ha terminado y que mientras haya gente con hambre, no ha terminado la Revolución. Para Raby, esto fue un proyecto ideológico progresista, de organización y combate a favor de un programa de reformas populares y no una invención ideológica impuesta a la masa magisterial. Pensaba que esta educación socialista debería realizarse en México porque en la legislación mexicana hay artículos con sentido colectivista y la escuela de este tipo debería organizar sociedades dentro y fuera del plantel, implementar talleres y campañas comunales pero también y con gran énfasis, hacer entender a los niños la importancia de la solidaridad obrera internacional, los sistemas de combate contra el capitalismo, que vean que las revoluciones políticas son engaños de los ambiciosos, enseñar los medios que la burguesía usa para explotar, embrutecer y fanatizar y enseñar con la Constitución, la parte revolucionaria y colectiva y, por tanto, los maestros deben ser los intelectuales que difundan las ideas anti imperialistas, indigenistas y socialistas y lograr una ideología clara dominante en favor del pueblo.[118]
Tomas Moro, hizo una analogía de las personas que roban y son castigadas con la pena capital (las cuales lo hacen porque tienen necesidades básicas de sustento como alimentarse y vestirse y este es su único medio de satisfacerlas) con lo que hacen los malos pedagogos que prefieren azotar a educar, algo que es ineficaz como remedio y en realidad lo que habría que hacer es arbitrar medios de vida porque, si bien es cierto, la industria y la agricultura son medios del pueblo para obtener su subsistencia, en ellas los nobles viven como zánganos a cuenta de quienes trabajan por una comida frugal y un salario ruin y que no tienen seguro su trabajo y a menudo son despedidos y, además, existe un oligopolio que genera bienes para enriquecer a unos cuantos y esta es la causa que haya tantos robos y problemas sociales porque mucha gente sin trabajo cae en la ociosidad. Por tanto, los trabajadores se entregan a un lujo ostentoso como forma de vida que genera que sus adeptos vivan míseramente o robando y esto sólo se detendrá cuando se frenen los monopolios, las personas no vivan en la ociosidad, sino trabajando y sean educados buenos ciudadanos desde niños para prevenir tener que castigarlos cuando sean grandes.[119]
Conclusión
Para Einstein, la unión entre la intelectualidad y la espiritualidad fortalecerían la conciencia de los individuos para pensar, hablar y obrar conforme a las virtudes de la Ética y la Moral, creando la sabiduría de la razón. Similar a la idea hegeliana de la Historia donde las diferentes épocas de la Humanidad siguen un orden conforme con el desarrollo del espíritu que trata de alcanzar la perfecta realización de la razón universal.[120]
Por tanto, la educación debe ser la instrucción y la disciplina sumadas a la generación del pensamiento crítico independiente a través de la praxis y el ejercicio colectivo de los buenos hábitos, primero con desconocimiento de causa, hasta que puedan ser realizados por voluntad consciente. Crosby decía que la prueba de haber entendido algo, es la habilidad para explicarlo y que la repetición convierte un proceso en perpetuo, en parte de la estructura.[121]
La propuesta pedagógica de Einstein puede explicarse de la manera siguiente:
La educación si es para el bien, no es pura instrucción. Todos somos estudiantes y maestros. Se educa con el ejemplo y se aprende por el ejemplo de otros, por el diálogo, la reflexión mutua y por el trabajo propio. Si se aprende o conoce algo, se tendrán los referentes y la habilidad para explicarlo. Si este conocimiento se lleva a la práctica, se asimilará y adquirirá dentro de los esquemas mentales de la conciencia, pero, si aunado a esto, con el conocimiento adquirido se realiza un trabajo o actividad que sea benéfica para la sociedad, se estará en contacto con el mejor aprendizaje significativo y el mayor reconocimiento que puede motivar a un estudiante a seguir estudiando y comprendiendo los misterios del Universo: poder servir a la Humanidad.
Por tanto, los pilares elementales de la educación del Siglo XXI[122] deberían ser:
- Aprender cómo aprender y cómo conocer mediante diferentes metodologías y métodos que ejerciten el intelecto, lo cognitivo, cuyo fin es construir conocimientos, aprender a pensar y a razonar.
- Aprender para ser es tener conciencia individual para reconocerse como parte importante de una sociedad. Su fin será construir y desarrollar buenas actitudes, buenos principios y valores y una personalidad armónica con la sociedad.
- Aprender porqué debemos vivir juntos es tener conciencia social, mejorar las emociones y los afectos, respetar la diversidad y rechazar la injusticia y la violencia. Su fin será construir valores universales y una nueva ideología que desarrolle un nuevo contexto ético social donde los individuos se respeten, se cuiden entre sí y exista la cooperación mutua para la conservación y no extinción de la Humanidad.
- Aprender para hacer es aprender a ser creativo. Su fin será construir habilidades para resolver problemas, mejorar lo existente mediante la renovación constante de todo y, así, lograr cambios positivos.
- Aprender para servir será eliminar los límites escolares, logrando que el aprendizaje sea significativo mediante la aplicación del conocimiento en la sociedad, creando una comunidad de aprendizaje solidaria y afectiva, en donde todos los seres humanos se apoyen entre sí. Su fin será fomentar en el individuo el interés y la motivación para aprender a lo largo de toda la vida para ser útil para el bienestar común y que todo lo que realice sea con visión de servirse a sí mismo pero también a los demás y a la naturaleza “vivir para servir, servir para vivir”.
La educación socialista no solamente debe lograr que los estudiantes se interesen por el bienestar común, sino, poco a poco, lograr la felicidad de todas las sociedades, de manera internacional, mediante la lucha unida por la transformación, el desarrollo, la conservación del entorno donde vivimos y, por tanto, este tipo de educación, es el camino hacia la paz anhelada.
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Notas:
- [1]Covarrubias Villa, F. Las herramientas de la razón, pp. 228-233. La filosofía de la praxis es una expresión, contraria a la hegemonía, que pertenece a las clases subalternas que tienen deseo de educarse a sí mismas para gobernar o conocer todas las verdades, aún las peores y no permitir ser engañados por la clase superior, visualizando un futuro mejor como guía de su práctica social. En la praxis, los problemas no solo se interpretan sino que se llevan a la realidad para ser resueltos; se investiga para actuar y no para explicar. Es mejorar la sociedad y no simplemente obtener una calificación. Ayuda que los estudiantes se sientan capaces de transformar las cosas mientras exista voluntad y las condiciones materiales de su realización y no como la práctica transformadora enajenada donde el sujeto se concibe como un objeto incapaz de provocar un cambio. Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, pp. 331-332. No existe una realidad válida en sí y por sí, sino, con relación con los hombres que la modifican.
- [2]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, pp. 154-155.
- [3]Rousseau, J. J. Contrato social, pp. 58-59.
- [4]Berkeley G. Principios del comportamiento humano, p. 109.
- [5]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 40.
- [6]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 214.
- [7]Einstein, A. Mi credo humanista, p. 55.
- [8]Einstein, A. Mi credo humanista, p. 85.
- [9]Einstein, A. Mis creencias, p. 83.
- [10]Delli Sante, A. M. En torno al concepto de ideología, pp. 28-35.
- [11]Hitler, A. Mi lucha, p. 44.
- [12]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, pp. 21-22.
- [13]Ozollo, J. Marx y el Estado, p. 80.
- [14]Covarrubias Villa, F. Las herramientas de la razón, pp. 39-41.
- [15]Althusser, L. Notas sobre el Estado, pp. 5-12.
- [16]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 145.
- [17]El idealismo es una corriente filosófica que afirma que existen ideas o abstracciones mentales que se descubren con ayuda de la razón y no por lo que perciben los sentidos.
- [18]Einstein, A. Mis creencias, pp. 9-13.
- [19]Covarrubias Villa, F. Las herramientas de la razón, p. 181.
- [20]Reimers, F. M. y C. K. Chung. Teaching and learning for the Twenty-First Century, pp. 1-2, 5-6.
- [21]Einstein, A. Mis creencias, p. 87.
- [22]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, p. 271.
- [23]Einstein, A. Mis Creencias, p. 8.
- [24]Einstein, A. Mi credo humanista, p. 85.
- [25]Dewey, J. Democracia y educación, p. 80.
- [26]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, pp. 44-45.
- [27]Hitler, A. Mi lucha, p. 68.
- [28]Aristóteles. Ética a Nicómaco, pp. 27, 30, 65, 89, 122-132, 151.
- [29]Berkeley, G. Principios del conocimiento humano, p. 76.
- [30]Einstein, A. Este es mi pueblo, p. 52.
- [31]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 157.
- [32]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 3, pp. 92-94.
- [33]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 111, 239-240.
- [34]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 16.
- [35]Kant, I. Sobre Pedagogía, p. 59.
- [36]Aristóteles. Ética a Nicómaco, pp. 3-4, 9-10, 16-20, 22, 34, 91, 162, 165, 167, 171.
- [37]Einstein, A. Este es mi pueblo, p. 18.
- [38]Einstein, A. Mis creencias, p. 84.
- [39]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 10-12.
- [40]Einstein, A. Este es mi pueblo, p. 6.
- [41]Einstein, A. Mis creencias, p. 17.
- [42]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 160, 215, 227-228.
- [43]Einstein, A. Este es mi pueblo, pp. 16, 46.
- [44]Einstein, A. Mis creencias, p. 82.
- [45]Einstein, A. Mis creencias, p. 7.
- [46]Descartes, R. Discurso del método, p. 41.
- [47]Baillet, A. La vie de Monsieur Descartes, pp. 50-51.
- [48]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, pp. 333-334. Para Gramsci, la religión era solamente una gran utopía donde los principios y valores del hombre en naturaleza existen por haber sido creado por Dios, como la fraternidad por ser todos hermanos hijos del mismo creador, la libertad al haber nacido libres entre los otros, la igualdad al haber sido todos creados iguales, haciendo parecer que todo esto no es de este mundo sino de otro inexistente y, por tanto, los hombres no se ven como iguales, ni como hermanos, ni como libres.
- [49]Moro, T. Utopía, p. 12.
- [50]Einstein, A. Mis Creencias, pp. 24-34.
- [51]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 20, 96-98.
- [52]Einstein, A. Mis Creencias, pp. 24-34.
- [53]Althusser, L. Sur le Contrat social, p. 40.
- [54]Ozollo, J. Marx y el Estado, p. 73.
- [55]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 27-30, 43, 55, 76, 80-81.
- [56]Einstein, A. Mis creencias, pp. 57, 64-65, 79.
- [57]Einstein, A. Ideas and opinions, p. 65.
- [58]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, pp. 36-37.
- [59]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, p. 42. Gramsci escribió que esta actitud es de los intelectuales mediocres y fallidos.
- [60]Crosby, P. La organización permanentemente exitosa, pp. 9-10, 37, 63, 80, 94-95, 99, 145, 189, 209, 229.
- [61]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 206.
- [62]Nuño Mayer, A. et al., Ruta para la implementación del Modelo educativo, p. 29.
- [63]Aristóteles, Ética a Nicómaco, pp. 152-153.
- [64]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 28-29, 82, 105.
- [65]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 28.
- [66]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 16-18.
- [67]Einstein, A. Mis creencias, p. 22.
- [68]Einstein, A. Mis creencias, p. 18.
- [69]Einstein, A. Mis creencias, pp. 18-19.
- [70]Aristóteles. Ética a Nicómaco, pp. 11, 169.
- [71]Moro, T. Utopía, p. 22.
- [72]Einstein, A. Mis creencias, p. 17.
- [73]Einstein, A. Mis creencias, p. 24.
- [74]Einstein, A. Ideas and opinions, pp. 57-58.
- [75]Einstein, A. Ideas and opinions, pp. 59-64.
- [76]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 14-15.
- [77]Einstein, A. Mis creencias, p. 51.
- [78]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 235.
- [79]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 82-83.
- [80]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 238-240.
- [81]Kant, I. Sobre Pedagogía, p. 48.
- [82]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 237-238.
- [83]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 104.
- [84]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 59-60, 67.
- [85]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 21-26.
- [86]Einstein, A. Mis creencias, p. 92.
- [87]Aristóteles. Ética a Nicómaco, p. 162.
- [88]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 234-235.
- [89]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 30-31.
- [90]Rousseau, J. J. Contrato social, pp. 38-39.
- [91]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 74-75.
- [92]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 138.
- [93]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 86-88, 91, 104.
- [94]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, p. 42. Gramsci dijo estar de acuerdo con Baldensperger que los humanos crean las glorias según las necesidades y no según los méritos.
- [95]Aristóteles. Ética a Nicómaco, pp. 71-72.
- [96]Covarrubias Villa, F. Las herramientas de la razón, pp. 96-97. La epistemología de la dialéctica crítica, a diferencia del positivismo hipotético-deductivo, es una forma de razonamiento que responde a una visión de la realidad en un determinado espacio y tiempo en la que una parte se concibe como condensación de múltiples determinaciones y se reconoce que la realidad cambia y, por tanto, es susceptible de transformarse mediante actividades concretas de conocimiento que nos acerquen a la apropiación de la realidad.
- [97]Aristóteles. Ética a Nicómaco, pp. 90-91.
- [98]Kant, I. Sobre Pedagogía, pp. 55-56.
- [99]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 19-20.
- [100]Dewey, J. Democracia y educación, pp. 295-300.
- [101]Tedesco, J. C. et al., Porqué importa hoy el debate curricular, pp. 3-4, 8-9, 11-12.
- [102]Einstein, A. Mis creencias, p. 56.
- [103]Einstein, A. Ideas and opinions, pp. 66-67.
- [104]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, pp. 93-94.
- [105]Aristóteles. Ética a Nicómaco, p. 162.
- [106]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 45.
- [107]Einstein, A. Ideas and opinions, pp. 54-55.
- [108]Einstein, A. Ideas and opinions, p. 56.
- [109]Einstein, A. Ideas and opinions, pp. 56-57.
- [110]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, p. 170.
- [111]Rousseau, J. J. Emilio o la educación, p. 12.
- [112]Trigo, F. Socialismo Individualista, pp. 6-7, 16-17, 20, 27-28, 30, 33-35, 38, 46, 73, 75-76, 118.
- [113]Kant, I. Sobre Pedagogía, p. 55.
- [114]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 5, pp. 35-37.
- [115]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, pp. 330-331. Kant dijo: Actúa de manera que tu conducta pueda convertirse en norma para todos los hombres, en condiciones semejantes. Gramsci pensaba que es difícil que alguien actúe sin creer que todos actuarían como él y cada quien actúa según la cultura de su ambiente y, por tanto, el que obra es el que crea las condiciones semejantes y por eso debe actuar como un modelo que quisiera difundir según el tipo de civilización para cuyo advenimiento trabaja y para cuya conservación resiste.
- [116]Kant, I. La paz perpetua, p. 14.
- [117]Nuño Mayer, A. et al., Modelo educativo para la educación obligatoria, p. 33.
- [118]Raby, D. L. La educación socialista en México, pp. 75-82.
- [119]Moro, T. Utopía, pp. 8-11.
- [120]Gramsci, A. Cuadernos de la cárcel, t. 4, p. 339.
- [121]Crosby, P. La calidad no cuesta, pp. 112, 114.
- [122]Delors, J. La educación encierra un tesoro, pp. 95-109.
- Autor: Félix Aquino Rodríguez. Licenciatura en Ingeniería en Sistemas Computacionales; Maestría en Pedagogía de las Ciencias Sociales; Maestro de Educación Media Superior en el Colegio Superior para la Educación Integral Intercultural de Oaxaca.
- Correo: [email protected]
Datos para citar este artículo:
Félix Aquino Rodríguez. (2017). Albert Einstein: Ciencia, Socialismo y Educación Socialista hacia la paz. Tercera parte. Revista Vinculando. https://vinculando.org/educacion/albert-einstein-educacion-socialista.html
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