Resumen
Los pensamientos surgen de contacto con realidades, las cuales se integran por nuestro sentir, lo que pensamos, lo que pretendemos saber y en su caso, del análisis que se realiza para concretar un evento u objeto, la realidad se concibe como sistema, o conjunto de elementos que se comunican, para que el individuo relacione su entorno con sus vivencias; el objetivo de la investigación es establecer los aspectos básicos para el desarrollo del individuo en la educación universitaria y las interacciones de colaboración del docente con una aplicación holística, para entender el medio, enfrentarse a la realidad y definir los ejes de idea, pensamiento, conocimiento, hacer ciencia y su aplicación, en una educación social de carácter vivencial.
Palabras clave: Aprendizaje, ciencia, educación, pensamiento, sociedad.
Iniciando el conocimiento
El hombre en su afán de entender todos aquellos sucesos que lo hacían responder a cada uno de los eventos existentes en el entorno y las necesidades generadas por su comportamiento, originó la necesidad de aprender a reaccionar ante las circunstancias que se presentan, a la vez de establecer, posibles soluciones que indican como resolverlas o anticiparse a ellas.
Esta condición en la cual el individuo desarrolló el conocimiento, junto con la generación de explicaciones emitidas, permite aceptar y proponer situaciones que delimitan su que hacer diario y entender el comportamiento de otros individuos biológicos, esto, para clarificar las acciones en la toma de decisiones ante los impactos de los grupos formados en sociedad y de la naturaleza.
El ir y venir de acciones contribuyó a que almacenara información en el cerebro, a la vez de usarla, cuando las condiciones eran similares a sucesos vividos, la recopilación de esta información y su utilización, permitió el salto de conjuntar aprendizajes adquiridos y aplicarlos conforme las actividades que exija su necesidad, sobre todo de sobrevivencia.
Como definición, la actividad mental asociada con el procesamiento, la comprensión, la capacidad para recordar y comunicar, donde recibe, percibe y recupera información que impacta en la toma de decisiones, en la realidad socioeconómica y política de su entorno, se considera pensamiento, y es un reflejo de lo que se siente, creando una realidad subjetiva, alejada de la realidad objetiva, que se visualiza solamente en la mente de quien lo vive (Victoria, 2012).
Esta capacidad ha sido descrita en la psicología, como la de planear y dirigir en forma oculta una conducta posterior, lo que prevenía de errores o permite postergar acciones y posibilita adaptaciones, mejores y efectividad de lo realizado (Melgar, 2000).
Para llegar a estos niveles se inventaron símbolos o signos que permite que la persona explique e identifican acciones, proponga ideas, propone significados, que depende del grado de desarrollo mental, cultural, relaciones sociales, entre otros, para ser usado y comunicarnos de distintas formas (Mendoza, 2007), en este caso lo importante, es que se logre convivir.
Revisar el origen del pensamiento y pretender involucrar el término conocimiento, se debe explicar, de una manera activa, cuando se transforma en tangible por medio la comunicación social, que influye en las formas de pensar y por lo tanto de actuar en sociedad, promover el intercambio de información que promuevan ideas y resolver problemas (Mejia y Escobar 2012); la palabra conocimiento, que la Real Academia de la Lengua promueve, es el proceso de averiguar, por el ejercicio de las facultades intelectuales, la naturaleza, cualidades y relaciones de las cosas, en que el individuo se apropie de la realidad y la entienda conforme lo que observa y especifica en base a significados; los cuales dependen de su formación cultural y humana (Martínez y Ríos, 2006).
Esto permite que el individuo asevere estas relaciones y las confronte con sus saberes; al reconocerla, impacta en sus significados y al entenderla la acepta como tal, por lo tanto, genera el conocimiento, que es el objeto o situación, entendido o comprendido por acciones que lo lleva a establecer este proceso mental, que, en la mayoría de los casos, las condiciones generales del ambiente las modifican (Melgar, 2000).
Estos estímulos influyen en la formación y expectativas de los individuos, por considerar diferentes concepciones del mundo y establecer interés de acuerdo a lo que se supone aprende, el sujeto actúa conforme si la situación fuera propia y con esto, desarrolla una conducta alineada al suceso vivido (Duek, 2009), lo que el constructivismo afianza como eje de formación educativa en una relación práctica.
El constructivismo y el pensamiento cotidiano
Bajo otro enfoque, la generación del pensamiento y la relación del racionalismo propuesto por Descartes, en que el ser humano sólo puede conocer lo que el mismo construye, con procesos mentales que contribuyen a la creación de un conocimiento, y, por tanto, en términos estrictos, el origen en esos procesos y de aceptación de los acontecimientos, con preceptos de la no causalidad, el “pienso, luego existo” introduce la separación entre el mundo material y el del pensamiento (Araya et. al. 2007).
Aceptar supuestos, es dejar fuera sentimientos y relación de hechos que contribuyen a la formación del hombre en sociedad y de su desarrollo sicosocial, tal parece que a todo le debemos de encontrar una explicación metodológica y que tuviera que ser comprobada para que así todos la repliquen, entenderla y ser aceptada como verdadera; Gomila (1996), comenta que las ideas son sucesos mentales que se generan a partir de imágenes, formadas por sucesos originados en el exterior y que nuestro cerebro codifica para formar ideas que están ligadas al cuerpo, cuerpo que está lleno de sentidos y que expresa de una u otra manera, lo humano del pensamiento.
Estas relaciones no son aislados, dependen unas de otras, tampoco son de una empieza y otra termina, la idea del ser técnico, plantea un procedimiento que genere verdades, o en su defecto rechace lo que para los trabajos no lo son, este proceso llega a discriminar factores que pueden contribuir a entender lo que para la metodología científica es falso, Aguilar (2010 p.765) explica en su artículo que estas formas de pensar, promueven tres nociones o categorías, en términos de lo que nosotros pensamos sobre el mundo hay extensión, uno sólo atribuible al cuerpo y pensamiento, dos sólo a la mente y finalmente tres, hay la noción de unión de mente y cuerpo; esto atribuible a los resultados de interacciones tales como sensaciones y pasiones, que implica que las relaciones son importantes en la generación de conocimiento y en la educación.
Estas relaciones internas y externas, que se generan, son esenciales para dar explicaciones a trabajos cargados de procesos, es cierto que debemos de entender lo que sucede, para no perder esas relaciones, la idea, es que no se debe de separar en forma casuística los procesos, que contribuyen, a que el entorno se entienda y se conceptualice en forma holística, como ejemplo, es a través de la colaboración o la aplicación de la socioformación, para realizar aprendizaje basado en proyectos o problemas, en los diferentes niveles educativos (León et al., 2018; Tobón et al., 2015).
La separación de eventos o parcialidades, de alguna manera, proporciona solo líneas de acción que contribuyen a respuestas cortas o a suponer acciones que se generan como parte de un sistema, pero al interpretarlo se encuentran lagunas conceptuales aplicadas a lo cotidiano.
Rodríguez (2010), expone que el aprendizaje activo, como parte de un aprendizaje social, actúa con la finalidad de resolver problemas reales a partir de soluciones abiertas que permitan la generación de nuevos conocimientos; esto integra a individuos en todos sus sentidos y a la situación en toda su magnitud (holismo), solo es adicionar las acciones correctas del pensamiento, para lograr metas y objetivos de aprendizaje.
Priorizar para encontrar soluciones, es observar las situaciones completas, en su conjunto, en su complejidad, de esta forma se pueden apreciar interacciones, simbiosis y procesos, que por lo regular no logran percibirse al estudiarse por separado (Briseño et al., 2010); los procesos de cognición llevan consigo entender lo que sucede e interpretar escenas, si esos sucesos no se comprenden, se buscan alternativas que permitan redireccionar, inventar y generar respuestas a nuestro parecer, por lo regular se establecen supuestos (hipótesis sociales) al situar las acciones como difíciles, entendiendo comúnmente la respuesta como una acción que no podemos resolver y queda en el limbo (Montero y Reyes, 2015).
Saber distinguir el momento para pensar y las relaciones que contribuyeron a su formación, permite definir diferencias, lo complejo es relacionar cada momento que contribuyó a ese resultado, por consiguiente, es conocer, analizar, interpretar y proporcionar acciones, sin olvidar que todo lo que se realice es sujeto a contribuir a sucesos alternos que impactan en lo cotidiano de las personas, de la sociedad misma, esperando que sea positivo; vislumbrar desarrollo de innovaciones, economía, sociedad, ambiente, el uso de las Tic y sobre todo, colaboración de los actores sociales, políticos y empresariales, que permita socializas saberes para afrontar problemas emanados de la misma sociedad (Tobón et. al., 2015)
Si trasladamos los saberes a ecosistemas, imaginen sus relaciones, dependen unas de otras, si existe un desajuste, afecta a todo; esto es dimensionar las acciones del pensamiento y la aplicación del mismo, a través de entender las relaciones y cuidados en su manejo, se debe buscar el equilibrio; si imaginamos la educación en este contexto, es trabajar como ecosistema, lo que apliques en el aula será un reflejo de la actuación en el exterior, con todas las responsabilidades y efectos correspondientes, todo empieza en la formalidad y el equilibrio, no sólo de nuestras actuaciones (Aragón, 2015),
La ciencia bajo esquema de participación
El conocimiento científico aplicado en la educación, debería de buscar verdades sin pretender ser absolutas, debería tener la característica de ver sus efectos y aportaciones, la ética presentada en las profesiones, un punto de partida para visualizarlo, tan sencillo es entender que todo lo que haga uno afecta al otro y esto debería ser inherente a las investigaciones, las cuales aportan parcialidades y dejan ver que debemos de seguir trabajando esas parcialidades para entender los procesos del quehacer y del pensamiento a nivel global.
El desarrollo de la ciencia ha ejercido una presión en la formas metodológicas para entender eventos y darle explicación, que permite considerar la probable verdad enmarcada desde el punto de vista científico, en este caso, los investigadores pretenden tener los elementos que expliquen lo que sucede, sin embargo ese momento de verdad carece de una validez absoluta cuando existen aspectos que permean en los procesos y por estadística pura, manejamos significancias donde concluimos que afecta o no los eventos investigados.
Considerar la experiencia desarrollada en las investigaciones, trasladada 50 años atrás, parece que no se ha aprendido, en este arte de la investigación, seguimos con cuadros espectaculares de muestreos, cuestionarios, bases de datos bajo software especial, así como documentos, que tal pareciera, queremos descubrir los aspectos, de por qué la sociedad está desarrollando ciertos esquemas de sobrevivencia ante el mundo, donde no se interpreta los efectos de una globalización, cuando es inherente a su desarrollo y que después de tanto número, la educación se presenta en un aula, a cargo del docente para resolver problemas socioculturales en ese espacio.
Seguimos en la mira de hacer las cosas de una forma conductista, sin conciencia de que, a cada momento, se libera un potencial de situaciones que son de significancia, para establecer relaciones a priori de momentos que permiten dilucidar saberes y aprendizajes.
En la medida de entender que no somos absolutos, debemos de reaprender a usar los aspectos que permiten tomar en cuenta ese dinamismo humano y reorientar acciones para que las investigaciones presenten propuestas pertinentes, trabajo colaborativo, entender la cosmovisión, diálogo, trabajo en equipo lo que significa una educación aplicada.
Sociedad pensante
Hablar de sociedad es referirse a todos y cada uno de los procesos que permiten formar a la humanidad, su comportamiento, su forma de ser, sus actitudes, sus enojos y virtudes, su cultura; en términos comunes seria generar relaciones para integrarse, donde el lenguaje es la parte fundamental de la comunicación y formación social; cuando hablamos de formar leyes es porque se logra tener procesos mentales de entendimiento, que hacen diferenciar a los Homo sapiens de los demás animales que integran la tierra y llegar a beneficios de una generalidad circundante que demanda respeto y equidad (Rodríguez y Rossi, 2005).
El proceso del pensamiento ligado al ser social, debe de presentar acciones que deban consolidarlo, sin embargo, cuando se llega a particularizar los significados, símbolos y signos, se generan puntos de vista personales y en ocasiones contribuyen al desajuste en el proceso social.
La complejidad en este rubro, no solamente es pensar en el desarrollo personal, sino como se reflejará en la sociedad tu actitud, esto no quiere decir que el individuo no tenga espacio y tiempo, sino por el solo hecho de que somos sociedad debemos de pensar que el logro debe impactar como ciudadano global y sostenible, para la auto-realización y la atención de oportunidades y construcción de conocimiento para la sociedad.
Propuestas finales
¿Deberíamos de preguntarnos entonces que papel jugamos en este mundo?, ¿Cuál es nuestro qué hacer?, si bien nuestra estancia es corta (viendo la parte de evolución) en nuestro momento histórico, establecemos nuestro devenir y por ende el papel o rol que jugamos, los osados tratamos de aportar a la sociedad lo que a nuestro parecer impacta y determina.
Aunque se propone en estos tiempos, lo individual por delante, el ser consiente debería significar aportación y vislumbrar opciones claras tanto para lo individual, como para la sociedad misma, inclusive definir que los procesos a implementar deben de tener esa visión, más sin embargo nos empeñamos en generar verdades absolutas.
La ciencia en términos estrictos, debe buscar ese desarrollo social y por ende los involucrados deben procurar ese pensar, al integrar acciones tomadas de un entorno lo que significa diagnosticar, encuadrar, analizar, discutir, interpretar y opinar, sobre la investigación teórica y práctica, que debe aportar conocimiento y permita crear, innovar en diferentes condiciones, ser colaborativa, que promueva la equidad y socialización para la formación y aprendizaje en la educación del siglo XXI.
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Acerca del autor:
Martínez-Valdés, Martin Gerardo. Universidad Tecnológica del Usumacinta. Universidad Autónoma de Chiapas. Libramiento Emiliano Zapata- Tenosique S/N Col Las Lomas, Emiliano Zapata Tabasco, CP 86981, Tel. 9343435690, [email protected], [email protected]
Datos para citar este artículo:
Martín Gerardo Martínez Valdes. (2019). Pensamiento, ciencia y sociedad para integrar la educación. Revista Vinculando, 17(1). https://vinculando.org/educacion/pensamiento-ciencia-y-sociedad-para-integrar-la-educacion.html
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