Descripción
La copra es un producto industrial que se obtiene del fruto de la palmera, el coco. A éste se le quita la cáscara; la fibra o bonete se raya y se seca y así se obtiene la copra. Tiene una gran variedad de usos. Con ella se fabrican dulces; en la industria se usa como materia para la extracción de aceite, que luego se emplea en la elaboración de cosméticos, velas, glicerina y otros insumos industriales; en la ganadería se utiliza la harina de coco, un subproducto de la extracción de aceite, como alimento para el ganado y en la agricultura se hacen abonos.
La palmera del coco es monoica, es decir, ambos sexos se encuentran en la misma planta.
Alta hasta las nubes
La palmera de cocos crece en las costas. Tiene un solo tronco, casi siempre inclinado, liso o áspero, y alcanza gran altura, de diez a veinte metros. Su grosor es de aproximadamente cincuenta centímetros, si bien va adelgazando conforme sube. La altura de la planta depende de las condiciones ecológicas, la edad de la palmera y el tipo de cocotero. Algunos ejemplares alcanzan hasta 24 metros de altura.
El coco tiene forma de ovoide -como la Tierra- y pesa hasta dos kilos y medio. Está cubierto de fibras. Su cáscara es amarillenta, correosa y fibrosa, de cuatro a cinco centímetros de espesor, con pelos fuertemente adheridos a la nuez. Adentro se encuentra el endocarpo, una capa fina y dura de color marrón, llamada también hueso o concha. Luego se encuentra el albumen sólido o copra, que forma una cavidad grande. Adentro se aloja el agua de coco, o albumen líquido.
Y cerca de la playa
Por la distribución geográfica del cocotero, sabemos que los climas cálidos y húmedos son los más favorables para su cultivo. Las costas son el lugar ideal. La temperatura media debe estar en torno a los 27ºC sin variaciones mayores a los 7ºC. Se ven afectados tanto por la poca como por la excesiva humedad en la atmósfera. Cuando gozan de los beneficios del riego o el nivel del agua del subsuelo es poco profundo, la planta absorbe más líquido y por consiguiente mayores nutrientes.
Los cocoteros no pueden desarrollarse en la sombra. Necesitan una insolación de cuando menos dos mil horas al año y un mínimo de 120 horas al mes. Requieren además de mil quinientos milímetros de lluvia al año o 130 al mes. Los vientos suaves o moderados favorecen su cultivo, en tanto que los vientos fuertes, sobre todo en periodos de sequía, aumentan la transpiración de la planta, que pierde mucha agua y resulta perjudicada.
Siembra y cosecha del cocotero
Los mejores suelos para el cultivo de cocotero son los livianos, arenosos, aluviales, es decir, sueltos, como los de la planicie costera. La planta se adapta bien en suelos donde las aguas subterráneas son salinas, pues demanda una gran cantidad de cloro. La misma naturaleza indica el momento en que debe realizarse la cosecha para la obtención del coco rayado, deshidratado y copra: cuando el fruto cae al suelo, o bien, cuando uno de los cocos de un racimo está seco.
Este texto es parte del Curso integral de cultivos agronómicos para biotecnología vegetal. Para leer acerca de los 50 cultivos de este curso, así como de las fuentes consultadas, por favor visite la Presentación del mismo.
Autor: M.C en BQ Juan Carlos Martínez Frías. Centro de Investigación y Estudios Avanzados (CINVESTAV) del Instituto Politécnico Nacional, Campus Guanajuato.
Datos para citar este artículo:
Juan Carlos Martínez Frías. (2012). Propagación y técnicas de cultivo de la Copra (Cocus nucifera). Revista Vinculando, 10(2). https://vinculando.org/mercado/agroindustria/propagacion-y-tecnicas-de-cultivo-de-la-copra-cocus-nucifera.html
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